La segunda y tercera caravanas de migrantes centroamericanos que avanzan por el sur del país hacia la frontera con Estados Unidos en busca de asilo político decidieron permanecer este martes en las ciudades de Tapanatepec, Oaxaca, y Huixtla, Chiapas, respectivamente, adonde arribaron el lunes pasado, y continuar su marcha este miércoles. Integran ambos contingentes aproximadamente 3 mil 500 personas.

Voceros de los dos grupos coincidieron en que los siete bloqueos que productores mexicanos del Istmo oaxaqueño realizan en pro de sus demandas impiden el paso de camiones de transporte y de carga, por lo que ante la falta de aventones tendrán que caminar a partir de la madrugada de este miércoles, cuando reanuden la marcha.

Los mil 500 centroamericanos que integran la segunda caravana acordaron permanecer en el parque público de Tapanatepec, debido a que están muy agotados y con los pies lastimados, después de caminar hasta seis horas continuas.

En agradecimiento a los habitantes de esa localidad, los migrantes se dedicaron a limpiar de basura el río y las calles. A las tres de la mañana de este miércoles continuarían su marcha hacia los poblados oaxaqueñas de Santo Domingo Ingenio, Santiago Niltepec o Matías Romero.

La única casa de cambio de Tapanatepec tuvo mucha afluencia, debido a que los indocumentados cambiaban sus monedas por pesos. Mientras pasaban las horas, los niños –alrededor de 100– acudieron al río, ubicado a unos metros del refugio, y aprovecharon para darse un chapuzón para mitigar el calor de 35 grados centígrados.

El módulo de los Servicios de Salud de Oaxaca atiende a los menores y mujeres. La caravana es resguardada por elementos de la Policía Federal, de la Gendarmería y del grupo Beta del Instituto Nacional de Migración, al igual que de la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca y de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.

En Huixtla, los más de 2 mil integrantes de la tercera caravana, conformada mayoritariamente por salvadoreños, decidieron permanecer un día más en el parque central de la localidad, informó Irineo Mújica, director de la agrupación Pueblos sin Fronteras, que los acompaña.

Mújica, quien tiene las nacionalidades estadunidense y mexicana, opinó que después de los comicios va a bajar un poco la presión para nosotros, porque también nos presionaban como activistas, aunque Donald Trump está buscando la relección y va a seguir actuando, ya está retirando los documentos a muchas personas. “Este señor tiene los mismos pensamientos y tácticas de Adolfo Hitler; no nos ve como personas, sino como animales.

Muchos integrantes de Pueblos sin Fronteras pensábamos que no era el tiempo para que estas caravanas se realizaran, porque eran en beneficio de Donald Trump, que es racista y está en contra de los migrantes. Nos preocupaba eso, pero igual no se pueden controlar ni predecir, expresó.

Dijo que los centroamericanos se instalaron en el parque central desde la tarde y noche en que llegaron a Huixtla. Cada caravana nueva es un reto más grande. Esta es un reto, pero viene más calmada y tranquila. En esta vienen entre 2 mil y 2 mil 500 personas, salvadoreños la mayoría.

Comentó que a diferencia de la primera y la segunda, integradas mayoritariamente por hondureños, esta es más seria, más disciplinada y respetuosa, aunque también es cierto que las dos anteriores fueron más golpeadas y criminalizadas por el gobierno.