Orizaba, Ver., Cerca de 5 mil personas, maestros y ciudadanos en general, marcharon ayer en esta ciudad del centro de Veracruz a fin de exigir justicia para los hermanos Román y Ernesto Pérez González, profesor y odontólogo, respectivamente, asesinados el pasado jueves, al parecer por policías municipales.

La manifestación llegó hasta los bajos del palacio municipal y el alcalde priísta, Igor Rojí López, destituyó al director de gobernación, Juan Ramón Herebia.

María González y Román Pérez, padres de los jóvenes, acusaron a Herebia –encargado de coordinar a los uniformados– de intentar culpar a sus hijos de una supuesta agresión a los policías, de alterar la escena del crimen y de impedirles que pidieran una ambulancia para atenderlos.

La movilización comenzó en la escuela secundaria general Ignacio de la Llave, en el cruce de avenida Cri-Cri y Poniente 8, de la que Román Pérez Martínez, padre de las víctimas, es director.

Vestidos de blanco, los manifestantes gritaban consignas como ‘‘¡Señor gobernador (Miguel Ángel Yunes), exigimos todo el peso de la ley para los asesinos del doctor Ernesto y el profesor Román! ¡No más impunidad! ¡Justicia, justicia!’’

Al llegar a la alcaldía, los inconformes exigieron destituir a Juan Ramón Herebia, quien el sábado pidió licencia al cargo por tres meses, mientras concluye la investigación.

Mientras los inconformes aguardaban en la explanada del parque central, una comisión encabezada por el padre de las víctimas se reunió con el alcalde.

Desde el balcón del palacio municipal, Román Pérez dio a conocer la destitución del funcionario. Minutos después Rojí López la confirmó en rueda de presa. Dijo que Herebia enfrentará a la justicia y reiteró su disposición de apoyar a los deudos. Asimismo, sostuvo que desde el primer momento di la cara y he apoyado a la familia.

Se espera que el jueves Juan Ramón Herebia comparezca ante la fiscalía regional.