El convenio celebrado entre Seguros Inbursa y la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) para ofrecer seguros de gastos médicos mayores al personal universitario no ha cambiado su cobertura, como aluden lagunos asegurados, y contempla la contratación de un mínimo de 17 mil 81 y un máximo de 37 mil 71 pólizas, de acuerdo con datos de la casa de estudios.

Las bases de la licitación DGPR-LPN-023/2018, que le fue adjudicada en septiembre a Inbursa, indican que los seguros de gastos médicos mayores que se adquieran por este convenio son exclusivos para un sector de los trabajadores de la UNAM y sus familias, su contratación es individual, voluntaria y optativa, y el pago de cada seguro corre por cuenta de cada trabajador.

El total de pólizas emitidas al amparo del convenio de la UNAM e Inbursa, el tercero consecutivo que obtiene la aseguradora con la Universidad desde el 2014, cuando venció el contrato que la institución tenía con Banorte-Generali, dependerá del número de trabajadores que decidan contratar pólizas personales y uno o más de sus familiares. Por ello, el convenio no contempla un número fijo de pólizas.

Si bien el convenio actual no estaba disponible hasta ayer en la página de transparencia de la universidad, sí lo está el firmado en 2016 por la UNAM y la misma aseguradora. Ahí se señala que la casa de estudios se compromete a hacer las retenciones de nómina que la aseguradora le solicite cuando algún empleado contrate un seguro. Inbursa se comprometió entonces a pagar a la institución el 5.5 por ciento del monto de cada retención quincenal.

Los montos de pago por una póliza según ese convenio están entre 4 mil pesos y poco más 23 mil pesos, dependiendo de la edad de cada asegurado.

Quienes pueden contratar un seguro por medio del convenio entre Inbursa y la universidad son los miembros del personal académico emérito, de carrera de tiempo completo, funcionarios, secretarios administrativos o jefes de unidad administrativa, taller coreográfico, grupos de teatro, académicos de Ensenada, Baja California, por ejemplo.

De acuerdo con académicos, las reglas para otorgar servicios médicos fueron cambiadas por Inbursa sin previo aviso a partir del nuevo convenio. La UNAM y la aseguradora, sin embargo, han explicado que no fue así.

La casa de estudios ha planteado que la aseguradora debe brindar la misma cobertura que los trabajadores tenían contratada antes de la nueva licitación.