La industria maquiladora es la única que puede contratar de manera masiva a los migrantes centroamericanos que ingresaron a México si el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, les otorga visas de trabajo, planteó Luis Aguirre Lang, presidente del Consejo Nacional de la Industria Maquiladora y Manufacturera de Exportación (Index).

Este sector no sólo ha detenido los flujos de mexicanos hacia Estados Unidos sino que los ha repatriado, sostuvo el dirigente ante Pedro Romero Torres-Torija, responsable de los asuntos de la frontera norte del gobierno electo y decenas de empresarios durante la inauguración de la 45 Convención Nacional de Index, realizada en Chihuahua y transmitida por Internet.

Actualmente, dijo, no sólo existe una globalización comercial sino también migratoria de talento y de familias que buscan lo que no encuentran donde nacieron. Si el presidente electo, ya estando en funciones, decide emitir reconocimiento con visas de trabajo a los flujos migratorios de Centroamérica que ya están en territorio nacional, los únicos centros de trabajo con capacidad de contratación masiva son nuestras plantas de la industria maquiladora y manufacturera de exportación.

La caravana de migrantes no fue decisión de México, pero sí es elección de éste realizar una reflexión profunda sobre el sentido de los flujos de migración y el soporte social que han sido y son los centros de manufacturas avanzadas en diferentes regiones del país.

Puntualizó que la solución no está en cómo detener los flujos, con muros legales o físicos, sino en cómo reintegrarlos a la economía local o regional, lo mismo que en respetar el estado de derecho de un país receptor de migrantes.

Luis Aguirre Lang refirió que México deportó 436 mil migrantes guatemaltecos, salvadoreños y hondureños entre enero de 2015 y septiembre de 2018, superando a los expulsados por el gobierno de Estados Unidos, el cual repatrió en el mismo periodo a 293 mil 813 centroamericanos.

Consideró que los centros de manufactura de exportación representan una alternativa de desarrollo económico para los gobiernos de Centroamérica, como lo son hoy para México, pero acotó que se requiere ganar su confianza con el cumplimiento regulatorio y las habilidades que desarrollen en el talento humano.