Jerusalén. El periodista desaparecido Jamal Khashoggi estaba en el corazón de un ejército en línea de activistas sauditas que luchan en una guerra cibernética contra información errónea, reveló un amigo del comunicador. Khashoggi, quien desapareció durante una visita al consulado de Arabia Saudita en Estambul hace más de dos semanas, donó 5 mil dólares al Ejército de Abejas, movimiento que ofrece protección cibernética a activistas sauditas que necesitan una plataforma segura para luchar contra los trolls y bots pro gubernamentales. Parte de lo que hizo que (las autoridades) se enojaran con Jamal fue que estaba trabajando específicamente en este proyecto dirigido a las redes sociales. Él fue quien nos financió, dijo Omar Abdulaziz, amigo de Khashoggi. Abdulaziz, residente en Canadá, afirmó que fue atacado en mayo pasado con un plan similar para desaparecerlo. Y mientras el Washington Post publicó la última columna de Khashoggi, en la que destacó la necesidad de libertad de prensa en Medio Oriente, el presidente estadunidense, Donald Trump, dijo que cree que el periodista está muerto y confió en los informes de inteligencia que sugieren un papel de Riad para asesinarlo. El secretario de Estado, Mike Pompeo, pidió al jefe de la Casa Blanca conceder unos días más a Arabia Saudita para avanzar en la investigación.