Estudiantes del Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH) plantel Azcapotzalco y autoridades universitarias han sostenido mesas de diálogo en las que acordaron medidas para aumentar la seguridad en la institución.

En la escuela aún no se normalizan del todo las labores, luego del paro de actividades que una asamblea estudiantil impulsó a finales de agosto y del ataque que un grupo de alumnos de ese plantel sufrió el 3 de septiembre a manos de porros frente a Torre de Rectoría de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Información del CCH indica que se instalarán próximamente alarmas de pánico y cámaras de vigilancia en la sede de Azcapotzalco con la finalidad de incrementar la seguridad. Asimismo, se tomarán acciones para mejorar el sendero y el transporte.

El martes pasado se continuó con la mesa de seguimiento para avanzar en el cumplimiento del pliego petitorio de los estudiantes.

Sobre la asignación y redistribución de alumnos en los grupos, así como de la restitución del mobiliario faltante en las aulas y laboratorios, se dijo que ya se había concluido satisfactoriamente.

También se informó de la publicación de la convocatoria, el 8 de octubre, para nombrar a la directora o director del plantel.

Se planteó que profesores de la Facultad de Artes y Diseño restauren los murales realizados por estudiantes que habían sido borrados por las autoridades del plantel, uno de los motivos por los que se inició el paro.

Respecto de las situaciones de acoso, la coordinadora de Oficinas Jurídicas de la UNAM, Marisela Morales, explicó los procedimientos de atención y denuncia e informó de las 31 expulsiones de jóvenes que participaron en los actos violentos del 3 de septiembre y de los 18 que han sido vinculados a proceso penal por las mis-mas causas.

A pesar de la compleja problemática que enfrenta la comunidad del plantel Azcapotzalco, a más de dos meses de crisis, se observan avances significativos en la restitución de las actividades académicas, como se puede percibir en las labores que realizan los trabajadores administrativos y los profesores, pues casi 90 por ciento ya asiste a sus clases, de acuerdo con información del CCH.