La fracción de Morena en la Cámara de Diputados presentó una iniciativa de cambio a los artículos tercero y 73 constitucionales, con el propósito de derogar la reforma educativa promulgada en 2013 por el presidente Enrique Peña Nieto.

Irán Santiago Manuel, representante del partido enlistó en el orden del día de la sesión de ayer su propuesta para modificar incisos de ambas normas.

La reforma constitucional que se pretende controvertir fue publicada en el Diario Oficial de la Federación el 26 de febrero de 2013, con la pretensión de dotar al sistema educativo nacional de los elementos que impulsaran su mejoramiento y fortalecieran la equidad.

Estableció la responsabilidad del Estado de garantizar la calidad de la enseñanza pública obligatoria, la creación del servicio profesional docente, el Sistema Nacional de Evaluación Educativa y la conformación del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE), este último como máxima autoridad en la materia. También abrió pauta para la promulgación de las leyes General del Servicio Profesional Docente y del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación, así como a reformas de la Ley General de Educación.

El argumento del legislador redunda en considerar la reforma constitucional y las leyes secundarias descritas como “el punto de partida a una modificación educativa disfrazada de cambio laboral-administrativo.

Las modificaciones planteadas no corresponden a una reforma educativa, sino a la rectificación de la gobernabilidad del sistema de enseñanza y, por tanto, un instrumento represor para castigar y despedir a los maestros que han dedicado toda su vida a esta noble actividad.

El reproche incluido en el texto de la propuesta refiere que las políticas educativas aplicadas por los gobiernos neoliberales de los partidos Revolucionario Institucional y Acción Nacional, con la colaboración del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación SNTE), dirigido por Elba Esther Gordillo durante cuatro sexenios, tuvieron un trasfondo político-electoral, utilizado como moneda de cambio al mejor postor; nunca fueron dirigidas a la mejora del sector ni a una evaluación de los resultados.

La iniciativa que será turnada a la comisión respectiva también reclama que la reforma nunca consideró la diversidad étnica y cultural, ni la realidad social y económica del país. Por lo que se refiere a la creación del INEE, señala que nunca se logró obtener un diagnóstico del sector, sino castigar y dañar la estabilidad laboral del maestro. Además, nunca ha sido autónomo, pues tiene mayor poder político que rigor académico o técnico.