Zacatecas, Zac., Los presidentes municipales morenistas de Fresnillo, Guadalupe y la capital de Zacatecas, tienen problemas para ofrecer servicios como alumbrado público, potabilización y distribución de agua, así como recolección de residuos sólidos, luego de que sus antecesores priístas dejaron en quiebra esos municipios.

Saúl Monreal Ávila, edil de Fresnillo, halló una deuda de 130 millones de pesos que le heredó el priísta José Haro de la Torre. A menos de un mes de tomar su cargo, consiguió un préstamo urgente de 10 millones de pesos para pagar el suministro eléctrico de los equipos de bombeo de los pozos donde se distribuye la red de agua potable a 185 mil habitantes.

Para conseguir recursos, Monreal Ávila puso a la venta una camioneta GMC modelo 2013, tipo Suburban, que tiene blindaje nivel siete y fue adquirida en la administración del priísta Benjamín Medrano Quesada para su uso en el periodo 2013-2016.

Es un vehículo fastuoso e innecesario para mí. Lo puse a la venta por Internet en 2 millones de pesos y ya recibí una decena de ofertas de empresarios de Aguascalientes, Guadalajara y Monterrey por ella, pero ofrecen menos dinero, aseguró.

Ulises Mejía, alcalde de la capital zacatecana, enfrentó a inicios de semana una rebelión de trabajadores de confianza que concluyeron su periodo de tres años en la administración de la priísta Judith Guerrero López. Bloquearon los accesos al ayuntamiento, pues se oponen a recibir la liquidación que marca la ley.

Heredan deudas

Ulises Mejía anunció que continúa revisando con detalle el estado financiero que le heredó la administración de Guerrero López a fin de dar a conocer el monto exacto de la deuda pública, la cual calculó inicialmente en 80 millones de pesos.

Julio César Chávez Padilla, alcalde de Guadalupe, recibió una deuda de 850 millones de pesos, equivalente a dos años el total del presupuesto de ese ayuntamiento. Ahora tiene problemas financieros para que operen los camiones del servicio público de limpia.

Chávez Padilla, quien gobierna una población de más de 200 mil habitantes, también enfrentó a inicios de semana una protesta de trabajadores de confianza que laboraban para Enrique Flores Mendoza, ex edil del PRI que buscó la relección en el cargo y no la obtuvo.

Indicó que por la falta de dinero no hay para comprar combustible para los camiones del servicio de limpia, lo que ha provocado que en decenas de colonias se acumulen bolsas de residuos que la gente deja en las esquinas de las calles.

Aunado a ello, hay una campaña mediática de locutores y conductores en radio y televisión, cuyos concesionarios están ligados al PRI en Zacatecas, que critican la incapacidad de Morena para gobernar.