Miércoles 3 de octubre de 2018, p. 14
La Cámara de Diputados se sumó a la satisfacción del gobierno de Enrique Peña Nieto y del equipo del presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, por el resultado de la negociación del Acuerdo Estados Unidos-México-Canadá (Usmca, por sus siglas en inglés).
Por mayoría, los grupos parlamentarios representados en San Lázaro se pronunciaron en favor del acuerdo comercial.
El ex subsecretario de Hacienda Fernando Favela (PRI) fue el encargado de ponderar el acuerdo, producto de la participación definitiva, dijo, de negociadores mexicanos.
Desde la tribuna dio lectura a la proposición que ya había sido aceptada por los coordinadores parlamentarios, aglutinados en la Junta de Coordinación Política (Jucopo):
Se reconoce el trabajo realizado por el gobierno de la República, el gobierno electo y los sectores involucrados en la materialización de este importante acuerdo
, indicó.
La vicepresidenta de la mesa directiva, Dolores Padierna Luna, aclaró: “no estamos votando ninguna ratificación del tratado, porque no nos corresponde; eso toca al Senado, que ya recibió el documento el domingo pasado, y sí es el texto completo, falta traducirlo al español y al francés.
Es importante señalar que la votación de este acuerdo no es ahorita ni próximamente, sino a finales de noviembre, y hay tiempo para entrar y profundizar en su análisis.
Por otra parte, este miércoles ocurrirá la comparecencia del secretario de Hacienda, José Antonio González Anaya. En el salón de plenos se espera una larga sesión.
Sobre el particular, el diputado Carol Altamirano (Morena) señaló que los resultados de la administración actual evidencian el fracaso del modelo económico. El primer dato incuestionable es que el crecimiento ha sido mediocre. Una tasa de 2 por ciento del producto interno bruto es mala y es obvio que está por debajo de las promesas de crecimiento
.
Anticipó que en esta comparecencia “se espera una justificación dogmática de un modelo que no ha dado los resultados esperados. Este gobierno impuso la reforma energética, pero no hay un crecimiento de la plataforma de producción, impulsó el outsoursing y la flexibilización laboral, pero eso no generó empleos de calidad, y en cambio se mantienen los privilegios fiscales, el crecimiento mediocre y la desigualdad.