Una canadiense, la primera mujer galardonada en 55 años
revolucionaron la física del láser y los instrumentos de precisión avanzada que abren campos inexplorados de investigación y una multitud de aplicaciones industriales y médicas, indicó la Real Academia de Ciencias de Estocolmo.Foto Ap y Afp
Miércoles 3 de octubre de 2018, p. 2
Estocolmo. Tres científicos que desarrollaron los láser ópticos que allanaron el camino para los instrumentos de precisión que se utilizan en la cirugía correctiva de ojos, ganaron este martes el premio Nobel de Física, entre ellos la primera mujer en 55 años: una canadiense, un estadunidense y un francés.
El estadunidense Arthur Ashkin, de 96 años, se llevó la mitad del premio, mientras el francés Gérard Mourou, de 74 años, y la canadiense Donna Strickland, nacida en 1959, compartirán la otra mitad, precisó en Estocolmo el jurado del prestigioso galardón.
Sus hallazgos revolucionaron la física del láser y los instrumentos de precisión avanzada que abren campos inexplorados de investigación y una multitud de aplicaciones industriales y médicas
, indicó la Real Academia de Ciencias de Estocolmo.
Ashkin, el laureado de mayor edad de los Nobel en todas las categorías, fue premiado por desarrollar la pinza óptica
, instrumento que permite manipular organismos extremadamente pequeños, como células o bacterias.
En 1987 logró atrapar bacterias vivas sin dañarlas y conservándolas en un ambiente estéril. Las pinzas se utilizan desde entonces en los laboratorios para estudiar los microorganismos, pero también en las nanotecnologías para el control de micromotores e incluso en los inhaladores de asma.
Técnica que genera impulsos de gran potencia
Mourou, egresado de Ecole Polytechnique, prestigiosa facultad de ingeniería francesa, y su alumna Donna Strickland, fueron galardonados juntos por desarrollar la técnica de la amplificación de los láser, llamada Chirped Pulse Amplification, que genera impulsos ultracortos y de gran potencia.
Además de su contribución para el estudio del vacío o los agujeros negros, los trabajos de los dos científicos permitieron operar a millones de personas que sufrían miopía o cataratas.
Strickland, profesora de la Universidad de Waterloo, en Canadá, expresó sentirse honrada con el premio, que sólo han recibido dos mujeres en esta categoría desde que se creó en 1901.
Pensé que sería más fácil premiar a las físicas (...), espero que con el tiempo las cosas vayan más rápido
, sostuvo.
Marie Curie, quien en 1911 recibió el premio de química, fue galardonada junto a su marido Pierre en 1903 con el Nobel de Física. Maria Goeppert-Mayer lo obtuvo en 1963.
La Academia Real de Ciencias estima que el reducido número de mujeres galardonadas con premios científicos se explica por el hecho de que los laboratorios durante mucho tiempo mantuvieron las puertas cerradas para ellas.
Gérard Mourou, director del Laboratorio de Óptica Aplicada y profesor de la Ecole Polytechnique, dedicó 40 años a incrementar las capacidades de los láser y a hallarles usos técnicos o médicos, en particuñar en la cirugía ocular, pero también en la arqueología.
Desarrolló el concepto de luz extrema y fue uno de los impulsores de la creación del Instituto de Luz Extrema y del láser civil Apollon de Paris-Saclay, que debería alcanzar una potencia de cinco petavatios, esto es 1/35 de la potencia solar recibida por la Tierra.
El láser que desarrolló puede dar esa potencia durante un tiempo minúsculo, solamente algunos femtosegundos, es decir, menos de una mil billonésima de segundo, por lo cual la energía total equivale a la de una bombilla eléctrica en un par de días.
Mourou dijo que se estaba preparando para ir a nadar, como lo hace a diario, cuando recibió la llamada de la Academia. Uno no se lo espera. Tú te lo puedes imaginar, pero cuando pasa, es diferente
, admitió.
La Infraestructura Europea ELI desarrolla la construcción de otros láser en Hungría, Rumania y República Checa, que deberían superar la capacidad de Apollon.
Los científicos esperan hallar en el futuro múltiples aplicaciones, en particular en el procesamiento de desechos nucleares (reduciendo el tiempo de radiactividad), en las técnicas de imágenes médicas, en el tratamiento de tumores o en la limpieza de los millones de minúsculos desechos en órbita de la Tierra.