Jueves 27 de septiembre de 2018, p. 20
Larguísima resultó la jornada de reparto de las presidencias de 22 comisiones ordinarias que encabezará Morena en la Cámara de Diputados, que finalmente se decidió con el voto libre y secreto en urnas, proceso que se extendió hasta la madrugada de este jueves.
Anoche, la bancada logró sus primeros acuerdos derivados de la votación en urnas: Presupuesto –la más importante–, para Alfonso Ramírez Cuéllar, quien la ganó a Pablo Gómez con 40 votos de diferencia; Educación, Adela Piña; Derechos Humanos, Hugo Lustre; Infraestructura, Ricardo Francisco Exsome, y Energía, Manuel Rodríguez.
Mientras, por consenso se designó en la presidencia de Ciencia y Tecnología a María Solís; en Pesca a Maximiliano Ruiz y para Frontera Sur a Ciro González.
Para entregar las secretarías de las 45 comisiones ordinarias, Morena decidió que la tómbola era –y fue– la mejor forma de dividirse la participación en esos grupos de trabajo legislativo.
Los diputados de Morena dirimieron ayer en privado el método que les garantizaría repartirse las 22 comisiones ordinarias sin salir lastimados del proceso, porque la demanda superó el número de secretarías: sólo les alcanzaba para repartir 218 y la bancada es de 255. No a todos los legisladores les tocaría un espacio de relevancia en esas instancias, lo que perfiló la inconformidad; en la búsqueda de solución, se encontró que la tómbola era una salida.
Los legisladores –consultados por este este diario– describieron la forma en que se fueron repartiendo las secretarías. En las cinco mesas en las que se dividió el trabajo, se escribió en papelitos el nombre de cada diputado y los cargos disponibles.
Así, de 10 en 10 se desdoblaban los papelitos y se cantaba el nombre del ganador y de la secretaría de la comisión que le correspondía, sin tomar en cuenta el perfil de cada legislador. Ese proceso terminó casi a las cuatro de la tarde.
A esa hora, por decisión de la mayoría de los diputados de Morena, se modificó el esquema de selección, con el propósito de intentar un consenso para las presidencias
. Sin embargo, para las distintas comisiones se registraron varios candidatos. Por ejemplo, para la de Educación había cuatro aspirantes; de éstos, dos de Oaxaca.
La votación por papeleta comenzó poco después de las 20 horas, precisamente con la de Educación y Derechos Humanos.
La efervescencia por conseguir un cargo obligó a la coordinación del grupo a emitir una convocatoria con bases que permitieran desahogar el proceso, pero que al mismo tiempo presionó a los diputados. Esto, porque se previó primero el reparto de secretarías para quienes no solicitaron ser presidentes y, una vez concluida esa etapa, arrancaría la de elección de éstos.
Sin embargo, una de las cláusulas preveía: los diputados que participen en el proceso de definición de una presidencia y no resulten seleccionados podrán optar por integrarse como secretarios de dicha instancia, si hay espacios disponibles o integrantes, para lo cual sólo se reservarán dos espacios
.
Anoche, en tortuosa jornada, continuó la votación con papeletas de por medio, y al cierre de la edición de este diario no se definía quiénes de los 255 morenistas habían sido elegidos para ocupar las 22 comisiones ordinarias, incluidas las de Cultura y Salud.