La elevación del nivel del mar, es un problem derivado del cambio climático, lo cual ya se observa en Tabasco. A esto se suma que 60 por ciento de los cuerpos de agua del país están contaminados y hay zonas sobrexplotadas, como en La Paz, Baja California Sur, donde la intrusión salinas afecta 50 kilómetros de franja costera, señaló Felipe Arreguín, director del Instituto Mexicano de Tecnología del Agua (IMTA).

Detalló que uno de los principales efectos del cambio climático es la alteración del ciclo hidrológico, pero hay otras consecuencias importantes, como la sequía.

El país se encuentra en la franja paralela donde están los grandes desiertos. Un riesgo es que se intensifiquen las sequías; en contraparte está la capacidad de los océanos de generar ciclones tropicales (máquinas de vapor de agua), lo que genera más inundaciones.

Aseveró que según las mediciones, en promedio llueve lo mismo, pero ha cambiado la intensidad, esto es el veneno de los sistemas de drenaje de las cuencas. Otras amenazas son los cambios en uso de suelos, el crecimiento poblacional y la contaminación, señaló en el contexto del tercer encuentro nacional México ante el cambio climático, organizado por el Instituto Nacional de Ecología.

Añadió que se requiere una gestión integral de cuencas. “Desde hace 30 años la ley establece que se debe manejar en forma conjunta el agua superficial y la subterránea, pero no se hace porque no hay datos ni mediciones suficientes.

Cuando se piden recursos para medir, dicen que es gasto corriente: lo que no se mide no se administra, no hay ciencia básica para trabajar”.

Se debe dar una gestión con seguridad hídrica y dar un paso sobre lo que cambia con el ciclo hidrológico; la Constitución sólo habla del agua en la fase líquida, pero no de otra, agregó.