Muchos fans lloraron y le regalaron varios minutos de aplausos
Lunes 24 de septiembre de 2018, p. a13
Nueva York. Paul Simon cerró la noche del sábado un círculo con la canción final de su último concierto, ofrecido en Nueva York.
The Sound of Silence (El sonido del silencio), escrita en 1964, catapultó al éxito mundial a Simon y a su colega Art Garfunkel como el dúo Simon & Garfunkel. Más de medio siglo después, el primero cantó el tema sólo con su guitarra en un enorme escenario negro, con los ojos cerrados. Miles de personas guardaron silencio, muchas lloraron. Tras la última nota se desataron las ovaciones y minutos de aplausos.
¡Te queremos, Paul!
, gritó alguien. Simon miró al público durante un rato, se puso la mano sobre el corazón y no pudo contener las lágrimas. Significa más para mí de lo que creen
, aseguró.
El concierto en el Flushing Meadows Corona Park, fue también extraordinario para Simon, de 76 años. Fue el punto final de su última gira, Homeward Bound Farewell. No será el fin de su carrera, pero no volverá a salir de gira.
El cantante decidió volver a casa para su último concierto. Creció prácticamente a la vuelta de la esquina de ese parque de Queens. Bienvenido a casa
, decía un cartel junto al escenario.
Crecí a un corto viaje en bicicleta de distancia de aquí
, contó entre dos canciones. Los aviones que van al aeropuerto de La Guardia pasan tan cerca del parque que puede distinguirse de qué aerolínea son y Simon los saludó uno tras otro con un ¡Bienvenidos a Nueva York!
Estallido de emoción
En el tema Me & Julio Down By The Schoolyard el público estalló al llegar a la frase Goodbye to Rosie, the Queen of Corona
, que se refiere al barrio que se encuentra junto al parque. Luego entonó Homeward Bound mientras en una pantalla se proyectaban imágenes de su exitosa carrera. Toma eso, instituto de Forrest Hills
, señaló en referencia a su antigua escuela. Bueno, en realidad la pasé bien ahí
, expresó.
En alrededor de tres horas Simon cantó temas como Still Crazy After All These Years, 50 Ways To Leave Your Lover y You Can Call Me Al.
Todo ocurrió en una atmósfera de profunda nostalgia. Son tiempos extraños, ¿no?
, preguntó. ¡Resistan!
, pidió a sus seguidores.
Llegado un punto, anunció una canción con la que siempre tuvo una relación muy complicada
, pues la escribió y después se la dio a otros. Ahora recuperaré a mi hijo perdido
, afirmó, para después cantar Bridge Over Troubled Water en una versión completamente nueva recibida con entusiasmo por el público. Gracias, y gracias también a Aretha Franklin por su magnífica versión
, expresó el músico, honrando a la recién fallecida Reina del soul.
Simon se mostró también obstinado, como de costumbre. Junto a su banda interpretó muchas canciones poco conocidas de su carrera como solista y de las más famosas hizo nuevas versiones, por lo que sus fans lo tuvieron difícil para cantar con él. También prescindió de muchos de los grandes éxitos que tuvo con Art Garfunkel, con quien lleva décadas enemistado. Por supuesto, no se cumplió el rumor de que Garfunkel podría acompañarlo.
Ataviado de camiseta roja y pantalón negro, Simon se mantuvo fiel a sí mismo. No parece que eso molestase a sus fans. Fue una noche maravillosa
, dijo Dona, que fue al mismo instituto que Simon y asistió al concierto con su marido y su hijo. Quizá no era la noche para Art Garfunkel. Hoy hemos celebrado a Paul Simon
.