Lunes 24 de septiembre de 2018, p. 26
Londres. El incremento constante de la producción de petróleo en Estados Unidos tomará ritmo en los próximos cinco años, previó ayer la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), al pronosticar que la demanda del crudo que genera el grupo declinará pese a una creciente necesidad energética alimentada por la expansión global de la economía.
La declinante demanda de crudo de la OPEP es resultado de la fuerte oferta no-OPEP en el periodo 2017-2023, la más notable la de crudo de Estados Unidos
, detalló el organismo en su panorama mundial del petróleo a largo plazo.
Estados Unidos es la más importante fuente de crecimiento de oferta en el mediano plazo, contribuyendo (...) con dos terceras partes de la nueva reserva, liderada por la creciente producción de petróleo no convencional
, agregó.
La OPEP indicó que ha revisado su proyección de crecimiento de crudo y líquidos producidos por fuera del grupo, y que calcula que el incremento será de 4 millones de barriles diarios (bpd) en relación con el reporte del año pasado.
Según la estimación de la organización, los países no OPEP producirán 66.1 millones de bpd de crudo y líquidos en 2023, desde 57.5 millones bpd que pronosticaba en 2017.
La producción total de crudo de Estados Unidos llegaría a 20 millones de bpd. Eso haría que la mayor economía mundial, otrora el mayor importador mundial de crudo, se convierta en autosuficiente en materia energética.
Además, Arabia Saudita, líder de facto de la OPEP, y Rusia, su mayor aliado fuera del grupo, descartaron un incremento inmediato adicional en la producción, al rechazar los pedidos del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de que se tomen medidas para enfriar el mercado.