Viernes 7 de septiembre de 2018, p. 4
La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) investigará la actuación del coordinador de Vigilancia, Jesús Teófilo Licona Ferro, en los hechos violentos del lunes pasado, cuando un grupo porril atacó a estudiantes de bachillerato frente a la torre de Rectoría, en Ciudad Universitaria.
Licona fue suspendido ayer por el rector Enrique Graue por los hechos del 3 de septiembre, que dejaron dos estudiantes heridos de gravedad y otros 10 con lesiones.
Licona ha sido acusado por integrantes de la comunidad universitaria de no haber intervenido con contundencia para detener a los agresores cuando éstos lanzaban palos, piedras, botellas y bombas molotov contra los estudiantes del Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH) Azcapotzalco, que realizaban una manifestación.
En redes sociales se han difundido videos en los que se observa a Licona hablando con miembros del grupo porril durante el ataque, sin que se haya determinado qué objeto tuvo ese acercamiento.
El coordinador de Vigilancia ha trabajado durante décadas en la UNAM. En la huelga de 1999-2000 ya formaba parte del organismo.
La UNAM indicó en un comunicado que el rector se reunió por la mañana con integrantes de la Comisión Especial de Seguridad del Consejo Universitario (CU), a quienes encargó investigar la actuación de elementos de Vigilancia UNAM durante las agresiones de grupos porriles del lunes.
Les pidió revisar cuidadosamente los materiales que obran en poder de la Universidad con la finalidad de hacer el deslinde de responsabilidades que permita, si fuera el caso, aplicar las sanciones que correspondan.
El rector también solicitó a la comisión especial que analice y proponga medidas adicionales a las ya adoptadas para mejorar y hacer más eficiente la vigilancia de la Universidad.
La Comisión Especial de Segu-ridad es una instancia del CU integrada por 23 miembros: 20 conse-jeros universitarios, de los cuales seis son directores, cuatro profesores, dos investigadores, siete alumnos y un empleado administrativo; un profesor emérito, el secretario auxiliar y la abogada general de la UNAM. Sus conclusiones deben ser asumidas por la Rectoría, según un comunicado.
El personal de Vigilancia UNAM ha sido señalado e investigado porque algunos de sus integrantes fueron sospechosos de tener complicidad con narcomenudistas que operan en Ciudad Universitaria.
En marzo, la UNAM suspendió a tres vigilantes que no actuaron cuando un estudiante fue agredido y amenazado en CU, tras denunciar a jóvenes que consumían drogas en el campus.
