Las reformas estructurales fue el tema que ayer abordó el presidente Enrique Peña Nieto en el segundo de la serie de mensajes que durante estos días dirige a la población con motivo de su último Informe de gobierno. Recordó que desde el periodo de transición inició el diálogo con las principales fuerzas políticas para deponer las diferencias entre ellas y darle al país los cambios que hasta entonces se habían pospuesto.

Hace seis años, dijo, estábamos en el periodo de transición como ahora. El Presidente recordó que llegó como candidato de un partido de oposición al que en ese momento estaba en el gobierno (Acción Nacional), como habrá de ocurrir ahora.

En el video que nuevamente se grabó en el despacho presidencial de Palacio Nacional, el cual se transmitió ayer en medios masivos de comunicación en la mañana y a través de redes sociales, el titular del Ejecutivo federal dijo que desde entonces ya tenía un diagnóstico claro de la situación en que se encontraba el país, de cuáles eran las barreras que hasta ese momento habían impedido que se alcanzara un mayor crecimiento, niveles de desarrollo, atracción de inversiones y generación de empleos.

Paña Nieto resaltó que desde ese periodo, inició el diálogo con las principales fuerzas políticas: Nos sentamos a la mesa y empezamos a deponer las diferencias que teníamos, legítimas y naturales, para darle a México los cambios que se habían pospuesto.

De ahí surgió lo que ya iniciado su gobierno se llamó Pacto por México. Afirmó que las 14 reformas estructurales que se lograron en su administración han sentado las bases bien importantes para que México siga creciendo y siga teniendo mayor desarrollo.

Puntualizó que las reformas no son la meta, sino el medio para que la nación pueda crecer y generar mayores oportunidades para los mexicanos.

Incluso, subrayó, las modificaciones constitucionales y legales efectuadas son referente de éxito que otros países pretenden retomar para hacer los cambios estructurales que México sí logró concretar.