Artistas del English National Ballet, del American Ballet Theatre, de la Ópera de París, del Royal Ballet de Inglaterra y de los de San Francisco y Washington, entre otros, ofrecieron un espectáculo sublime en la gala Despertares, que se presentó este fin de semana en el Auditorio Nacional.

Antes de comenzar, Isaac Hernández, primer bailarín del English National Ballet, compartió con el público el premio Benois de la Danse que recibió en el teatro Bolshoi en Moscú, en junio pasado.

A lo largo de casi dos horas, y ante un Auditorio abarrotado, los bailarines de las mejores compañías del mundo deleitaron a los espectadores con un recorrido por diferentes estilos de contemporáneo y ballet, que fueron desde la danza clásica y el tap hasta el break dance.

Desde hace cuatro años, el bailarín tapatío presenta la gala Despertares, y ha logrado alentar el interés, la sensibilidad y la apreciación del arte en el público.

La gala, que reunió en un mismo escenario a las estrellas de 14 compañías internacionales, comenzó con la presentación del bailarín de tap, Jared Grimes, quien contagió de alegría al público que admiraba cada paso que se proyectaba en el foro y en las pantallas del recinto.

Al entusiasmo del bailarín neoyorkino siguieron Tamara Rojo, directora del English National Ballet, e Isaac Hernández, quienes mostraron la belleza y elegancia del pas de deux del tercer acto de Don Quixote, con coreografía de Marius Petipa. El público correspondió a la interpretación de la pareja con una fuerte ovación.

Conforme avanzaba la noche, la emoción del público aumentaba, ya que no dejaban de aplaudir las piezas de los bailarines.

Los movimientos suaves y el carisma de Jurgita Dronina, quien junto con Isaac bailó la obra Two Pieces for HET, de Hans van Manen, embelesaron a los asistentes. Había magia en el escenario. También sorprendió el virtuosismo de Esteban Hernández, bailarín del San Francisco Ballet, y de la bailarina María Kochelkova, que interpretaron un fragmento de El corsario, de Marius Petipa.

Una de las piezas que más se disfrutaron en la gala fue Lightbalance, en la que los bailarines, con trajes iluminados con leds de colores, hicieron diversas coreografías. Esta obra fue finalista de la temporada 12 del programa de televisión estadunidense America’s Got Talent.

Segunda parte de fantasía

La segunda parte de Despertares fue fantástica, porque el público mexicano tuvo la oportunidad de ver el estreno mundial de New Suite (Bach Suite), del estadunidense William Forsythe, interpretado por Sebastian Kloborg y María Kochethkova.

En tanto, en la obra Diana y Acteón sorprendió a todos el talento de Anastasia Limenko, del Ballet The Stanislavsky y Brooklyn Mack, del Washington Ballet.

En la recta final de la gala, hicieron su aparición estelar 12 bailarines del English National Ballet, que mostraron habilidades y una técnica clásica increíblemente pulida en la pieza Playlist (Track 1, 2), de Forsythe.

La obra, creada especialmente para el English National Ballet, alborotó y emocionó al público al máximo, con esa forma de mezclar la técnica clásica, con géneros como el house y el soul (Surely Shorty, de Peven Everett, e Impossible, de Lion Babe, en un remix de Jax Jones).

El emotivo cierre de la gala estuvo a cargo de los hermanos Esteban e Isaac Hernández, con su interpretación de My Way, coreografía de Stephan Toss. Al final, con la música de Impossible, cada bailarín agradeció a su estilo la entrega del público mexicano.

Cumplió Isaac Hernández con Despertares; ofreció a los mexicanos una noche memorable.

Queremos más despertares con lo mejor de la danza que se hace en el mundo.