Trabajadores de la desaparecida Ruta 100 marcharon sobre la avenida Insurgentes a la casa de transición del presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, para felicitarlo por su triunfo y pedirle su intervención en el conflicto laboral, que data de hace 23 años.

En el trayecto los afectados señalaron que para desaparecer al Sindicato Único de Trabajadores de Autotransportes Urbanos de Pasajeros Ruta 100 (Sutaur-100) declararon la quiebra de la empresa y no liquidaron a los conductores ni a los trabajadores del área administrativa.

No obstante, a este grupo encabezado por Jorge Cuéllar Valdez en 2004 le fue entregada la toma de nota como agrupación sindical, por la representación de 12 mil cuatro trabajadores, que desde 1997 esperan su liquidación conforme a la ley.

La caminata sobre una de las avenidas más importantes de la ciudad afectó vialidades que cruzan Insurgentes, como Chapultepec, Fray Servando Teresa de Mier, Durango. Al llegar a la casa de transición realizaron un mitin para solicitar oficialmente su derecho de audiencia.

Los trabajadores, en voz del presidente de la comisión negociadora, Jorge Cuéllar, señalaron que no guardan ningún rencor porque nos privaron de nuestra libertad en el pasado, cuando fue jefe de Gobierno del Distrito Federal (Andrés Manuel López Obrador), y cuando tomamos las empresas de Grupo Metropolitano yo fui a parar al Reclusorio Oriente y luego al Norte, expreso el líder.

Asimismo, entregaron un documento donde reclaman el pago de 28 por ciento que no les fue entregado y se utilizó para la operación de otro tipo de transporte concesionado. Piden la devolución con rendimientos de 30 por ciento que entregaron los líderes para formar una empresa de transporte y se lo dieron a Metrobús.

Cuéllar afirmó que los trabajadores tienen derecho a las ganancias que obtuvieron por las empresas de Metrobús porque fue con su dinero que se hicieron los proyectos.