Bolsonaro le sigue con 19%: Datafolha
El Tribunal Electoral tiene hasta el 17 de septiembre para decidir si anula su candidatura
Jueves 23 de agosto de 2018, p. 28
Río de Janeiro. El ex mandatario brasileño Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010) apareció ayer en el primer anuncio de campaña del Partido de los Trabajadores (PT) para las elecciones presidenciales del 7 de octubre, mientras un sondeo de Datafolha muestra que, pese a estar en la cárcel, sigue a la cabeza de la intención de voto con 39 por ciento; sin embargo, el Tribunal Superior Electoral podría prohibir su candidatura.
Quiero agradecer a todos los brasileños que siguen saliendo a las calles para defender sus pensiones, su educación, sus salarios y sus empleos
, dice Lula en su primer video de campaña. El PT subió la grabación a Internet, misma que se hizo días antes de que ex líder metalúrgico fuera encarcelado.
El estudio de Datafolha, el más reciente de esta contienda, puso en segundo lugar al diputado de ultraderecha Jair Bolsonaro con 19 por ciento de intención de voto. Ninguno de los otros 11 candidatos superarían 10 por ciento de votación en estos comicios, como es el caso de la ambientalista Marina Silva, quien tiene ocho puntos.
En una segunda vuelta, prevista para el 28 de octubre, Lula derrotaría a Bolsonaro con 20 puntos de ventaja (52 frente a 32), indicó la encuesta. El estudio de Datafolha se elaboró con 8 mil 433 entrevistas, que se hicieron entre el 20 y el 21 de agosto, y presenta un margen de error de dos puntos porcentuales.
En junio esta casa encuestadora dio al fundador y abanderado presidencial del Partido de los Trabajadores 30 puntos y 17 al ultraderechista del Partido Social Liberal. El crecimiento de Lula también lo registraron MDA e Ibope, en encuestas separadas, que le atribuyeron 37 por ciento de intención de voto.
El Tribunal Superior Electoral tiene hasta el 17 de septiembre para decidir sobre varias impugnaciones contra la candidatura del líder de izquierda con base en la ley del expediente limpio, firmada por Lula en 2010 y que impide a candidatos condenados en segunda instancia aspirar a cargos públicos.
Lula cumple una condena de 12 años y un mes de prisión.