Ginebra

El Comité de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) indicó este viernes que Brasil debe permitir al ex presidente Luiz Inácio Lula Da Silva, quien permanece en prisión, ejercer sus derechos políticos y no sea descalificado para la próxima elección presidencial del 7 octubre, ya que su apelación está en trámite.

El Comité, con sede en Ginebra, instó a Brasil a que tome todas las medidas necesarias para asegurar que Lula pueda ejercer, mientras permanezca preso, sus derechos políticos como candidato en la elección presidencial de 2018 y pueda hacer campaña desde la cárcel.

El organismo consideró, además, que el ex mandatario de 72 años no puede ser excluido como aspirante hasta que sus apelaciones ante los tribunales hayan completado los trámites judiciales justos, el Comité de la ONU supervisa violaciones del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, así como la aplicación de Protocolo Facultativo.

El comité integrado por expertos independientes, señaló además que la medida urgente para preservar los derechos de Lula no implica que haya constatado una violación de esos derechos; subrayó que el caso continúa en estudio y el veredicto de la ONU se espera el próximo año.

Pero el Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil respondió poco después en un comunicado que las conclusiones del comité tienen carácter de recomendación y no poseen efecto vinculante jurídicamente, y se comprometió a encaminar al Poder Judicial las decisiones adoptadas por el organismo formado por expertos.

La cancillería destacó en el texto que su país cumple fielmente el Pacto de Derechos Civiles y Políticos y que sus principios son también constitucionales brasileños, aplicados con celo y absoluta independencia por el Poder Judicial.

Lula (presidente de 2003 a 2010), amplio favorito en los sondeos para los comicios de octubre, purga desde abril en Curitiba una sentencia de 12 años y un mes de cárcel por corrupción pasiva y lavado de dinero, fue condenado como beneficiario de un apartamento ofrecido por la constructora OAS para obtener contratos en la estatal petrolera, Petrobras y enfrenta además otras cinco causas judiciales aunque se declaró inocente en todas y denuncia una persecución político-judicial para impedirle volver al poder.

El miércoles pasado, el Partido de los Trabajadores inscribió su candidatura a la presidencia, aunque esta debería ser invalidada en función de la Ley de Ficha Limpia, que determina que un condenado no está habilitado para presentarse a cargos de elección.

Por su parte, la ex presidenta Dilma Rousseff, tuiteó: Lula es inocente. Lula es candidato a la Presidencia de la República.