En México, sólo 47 por ciento de las mujeres en edad de trabajar forma parte de la fuerza laboral, muy por debajo del promedio de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), de 67 por ciento, informó el Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres).

Señaló que la desigualdad de género tiene un alto costo económico y el país sólo podrá alcanzar sus objetivos de desarrollo si las mujeres participan plenamente en la economía, la sociedad y la política.

El instituto reconoció, en un texto difundido en su página de Internet, que se han registrado importantes avances, las mujeres están incorporadas a todas las actividades productivas y científicas, pero aún siguen enfrentándose a muy diversas desventajas.

Expuso que mientras las relaciones entre hombres y mujeres estén marcadas por diferencias como fuente de inequidad y de desventaja, estarán limitando su desarrollo. Las posibilidades de alcanzar el desarrollo humano sostenido y sustentable, a mediano y largo plazos, están directamente vinculadas con el empoderamiento como el factor más importante para reducir la pobreza, la exclusión y la falta de oportunidades laborales.

En una numeralia aparte, refiere que si bien los datos de la participación de las catedráticas en proyectos de investigación resultan alentadores, puesto que ellas representan 40.8 por ciento, aún es necesario impulsar la participación de las mujeres en campos como el conocimiento del universo, la energía y el desarrollo tecnológico.

Indicó que sólo 35.8 por ciento de quienes pertenecen al Sistema Nacional de Investigadores son mujeres, y la diferencia se agudiza conforme el nivel aumenta: 21.2 por ciento de las mujeres y 78.8 por ciento de los hombres tenía el nivel III en 2015.