Han intentado asesinarme
▲ Escoltas del presidente venezolano, Nicolás Maduro, lo cubren para sacarlo de Plaza Bolívar, en Caracas, donde ayer daba un discurso en honor de un aniversario más de la Guardia Nacional Bolivariana, y lo trasladaron a La Casona. Siete militares resultaron heridos por las explosiones en el acto. El encuentro fue suspendido, al igual que la transmisión por televisión. Foto Xinhua
Acusa al mandatario colombiano de estar entre los responsables del ataque
Siete heridos dejó el embate con drones durante festejo a la Guardia Nacional
Pide a Trump combatir a terroristas que buscan cometer magnicidios
En comunicado, un presunto grupo agresor lamenta haber fallado
Bogotá rechaza el señalamiento contra Santos;
no tiene base, afirma
Agencias
Prometió 36 plantas potabilizadoras; colocó tres y ninguna sirve
Metales pesados en al menos 381 vecinos de los ríos Sonora y Bacanuchi
Aumentó más de medio millón la cifra de mexicanos sin acceso a servicios de salud pública: Inegi
Contraportada
▲ Dos tráileres fueron incendiados la tarde de ayer luego de que elementos del Ejército Mexicano chocaron contra presuntos huachicoleros (ladrones de hidrocarburos) que fueron sorprendidos por los militares cuando sustraían combustible de un ducto de Pemex. Al resultar descubiertos los sujetos dispararon contra los uniformados y se desató un tiroteo que dejó a un delincuente herido. El resto de los individuos, apoyados por pobladores, despojaron a dos conductores de sus tractocamiones, les prendieron fuego y cerraron la circulación en ambos sentidos de la México-Puebla a la altura de Santa Ana Xalmimilulco, junta auxiliar del municipio de Huejotzingo. Foto tomada de Twitter
La música de un organillo acentúa el ambiente dominical en el parque. Nubes bajas y ligeras motean el cielo azul pálido. Una enfermera empuja la silla de ruedas de una anciana. El vendedor de globos se detiene a mirar a los niños que gritan mientras se deslizan por laberintos y toboganes. Una mujer de párpados plateados le ordena a Max, el canario
adivinador, que salga de su jaula y se ponga el sombrero. Los curiosos aplauden.
Sentadas en una banca Rosenda y Áurea ven jugar a sus hijos. La más pequeña, Sarahí, aferrada a las cadenas del columpio le pide a Óscar que la impulse más rápido. Él accede a la petición hasta que su madre lo reprende:
Áurea: Más despacio, hijo. ¿No ves que Sarahí está chiquita y se puede caer?
Rosenda: Qué milagro que Óscar no trajo a
Las más...