Jueves 19 de julio de 2018, p. 12
Hasta el momento, cinco presuntos integrantes del grupo criminal Guerreros Unidos que son investigados por la desaparición de 43 normalistas de Ayotzinapa han obtenido amparos para que se les reponga el procedimiento.
Se trata de Salvador Reza Jacobo, El Wereke; Felipe Rodríguez Salgado, El Cepillo; Miguel Ángel Landa Bahena; Gildardo López Astudillo, El Gil, y Patricio Reyes Landa, El Pato.
Son parte fundamental en la investigación –con un expediente de más de 50 mil fojas–, pues sus declaraciones son parte en la que la Procuraduría General de la República (PGR) sustenta la versión de que los normalistas fueron quemados en el basurero de Cocula. De acuerdo con la declaración, que obra en el expediente de Patricio Reyes, Jonathan Osorio y Agustín García Reyes, El Chereje”, los normalistas fueron calcinados con diésel y llantas en el basurero.
Mencionaron que en la brecha que conduce al paraje Loma de Coyote, fue en donde recibieron a un grupo de normalistas por parte de las policías municipales, luego los trasladaron al basurero de Cocula.
Ahí fueron interrogados por los subordinados de Gildardo López, El Gil, lugarteniente de Sidronio Casarrubias, líder de Guerreros Unidos.
De acuerdo con la declaración de Sidronio, Gildardo López visitaba con frecuencia al entonces alcalde de Iguala, José Luis Abarca.