En Azcapotzalco, donde se gestó la madre de la cultura de la cuenca del valle de México, fue inaugurada la primera cancha de juego de pelota prehispánico de la Ciudad de México, la cual forma parte del Faro Poniente Xochikalli, que próximamente empezará a operar con la impartición de 12 talleres para los habitantes de la demarcación.

El jefe delegacional, Pablo Moctezuma Barragán, informó que por medio de actividades culturales, artísticas y deportivas busca incidir en la disminución de la inseguridad y violencia, que no sólo afecta a su demarcación, sino a la ciudad y al país.

Comentó que con un costo de 40 millones de pesos, se rescataron 7 mil 500 metros cuadrados de terreno baldío que por décadas fue utilizado de basurero y tiradero de cascajo, pero ahora se transformó en el Faro Poniente Xochikalli.

El centro de artes y oficios se encuentra justo frente a la estación El Rosario del Metro, donde se ubica una de las unidades habitacionales más grandes de la capital y donde necesitamos salidas educativas y culturales para mejorar el clima de seguridad y violencia. La juventud tiene que canalizar toda esa energía, por ello este espacio será muy importante, expuso Moctezuma Barragán.

Ayer se realizó el primer juego en la cancha donde se realizará el taller. Los interesados sólo necesitan habilidad corporal y juventud, porque la base del juego ancestral es controlar la pelota con el torso.

En este momento, expuso el funcionario, hay un registro de 20 personas interesadas en practicar este deporte prehispánico, pero se espera que el número aumente, porque es el momento de que las culturas originarias florezcan.