El ganador de la contienda electoral por la Presidencia de la República, Andrés Manuel López Obrador, informó que en la reunión que sostendrá hoy con el presidente Enrique Peña Nieto, le reiterará la necesidad de que trabajen en unidad, para que la transición se dé sin sobresaltos.

No vamos de ninguna manera a enfrentar al gobierno actual, resaltó. Dijo que su intención es que Peña Nieto pueda terminar bien su gobierno y él pueda asumir el mando el próximo primero de diciembre con estabilidad financiera y política.

En diversas entrevistas con medios electrónicos, resaltó que dentro de la reconciliación nacional a la que ha convocado, se va a reunir también con José Antonio Meade y Ricardo Anaya, con quienes contendió por la Presidencia de la República.

Aclaró que el hecho de contar con mayoría en el Congreso no lo hará actuar de forma autoritaria o con excesos, sino con respeto absoluto al Legislativo y a los demás poderes.

Al día siguiente de haber ganado las elecciones, López Obrador reveló que en la conversación que sostuvo el domingo por la noche con Peña Nieto –quien le llamó vía telefónica para felicitarlo por su triunfo–, el jefe del Ejecutivo federal fue muy respetuoso con él, e incluso le dio el trato de presidente electo y le ofreció apoyo para el proceso de transición, a fin de que pueda elaborar su programa gubernamental en los próximos dos meses.

Precisó que incluso fue Peña Nieto el que le ofreció la opción de que el encuentro de este martes fuera en Palacio Nacional y no en Los Pinos.

Muy temprano, pese a que durmió poco, luego de la larga jornada electoral de un día antes, en la que ganó con más de 50 por ciento de la votación, López Obrador se refirió a sus contendientes.

Detalló que que tanto el priísta Meade como el panista Anaya fueron también muy respetuosos. Ambos, detalló, lo llamaron telefónicamente para felicitarlo por el triunfo y yo les ofrecí buscarlos para platicar.

Lo hará, dijo, ya que está llamando a la reconciliación nacional porque necesitamos unirnos todos los mexicanos para sacar adelante al país. Agregó que afortunadamente no nos ofendimos en la campaña, o no nos ofendimos mucho, no nos pasamos de la raya, esto ayuda a que podamos platicar.

Incluso el mensaje que envió a Meade y Anaya es que los respeta mucho. Tengo muy buena impresión de José Antonio Meade, lo considero una gente buena, bien intencionada, aunque no era su tiempo, porque los mexicanos piden un cambio verdadero, una transformación.

En el caso del panista Ricardo Anaya Crtés, creo que demostró ser emprendedor y audaz; avanzó bastante.

El político tabasqueño insistió en que lo arrasador de su triunfo y el hecho de que tendrá mayoría en el Congreso no lo llevará a vamos a llevar a cabo ninguna acción contraria al interés general.

Voy ser muy respetuoso del Poder Legislativo, el Poder Judicial de la Federación, de los estados y de la soberanía de los municipios, y nos vamos a entender sin excesos, sin autoritarismos.