Volgogrado

Luego de 24 años sin conocer la victoria en un Mundial, la selección de Arabia Saudita venció 2-1 a Egipto en el último minuto, en duelo de eliminados del Grupo A en Rusia 2018.

Con este resultado, Arabia Saudita se quedó con el tercer lugar del sector, con tres puntos, mientras Egipto se ubicó en el fondo, sin unidades.

En el duelo celebrado en la Arena de Volgogrado, el Faraón Mohamed Salah abrió el marcador para el cuadro egipcio al minuto 22 con una magnífica definición ante el portero Yasser Al Mosailem.

Salman Alfaraj, de tiro penal al minuto 46 –tras la revisión en videoarbitraje–, y Salem Aldawsari (95) marcaron los goles del combinado árabe, dirigido por el argentino Juan Antonio Pizzi.

El partido, al que acudieron unos 30 mil espectadores, sirvió para que el arquero egipcio Essam El Hadary se convirtiera a sus 45 años en el futbolista de más edad en disputar un partido en un Mundial, batiendo el récord del colombiano Faryd Mondragón (43 años y tres días) en Brasil 2014.

El Hadary, quien ha disputado más de 150 partidos internacionales, atajó un penal a los saudíes, con 45 años y 161 días. Debutó con la selección en 1996, un año antes del nacimiento de Ramadan Sobhy Ahmed, uno de sus compañeros.

Otro condimento fue el duelo de los técnicos argentinos Héctor Cúper, de 62 años, y Pizzi, de 50, ambos debutantes como estrategas en una Copa del Mundo.

El arranque del encuentro resultó muy parejo y tuvieron que pasar muchos minutos para poder ver las primeras ocasiones de gol. No obstante, la estrategia de los dirigidos por Cúper quedó clara desde el primer instante: ceder el protagonismo a los saudíes para tratar de sorprenderlos al contrataque.

Arabia Saudita trató de aprovechar esa posesión para atacar a su rival por las bandas, pero la defensa egipcia se mantuvo firme.

La fórmula de Cúper tuvo buenos resultados: Salah recibió una pelota larga que pudo controlar con clase entre dos defensas rivales antes de definir elevando la pelota por encima de Yasser Al Mosaliem, al minuto 22. El ariete pudo ampliar el marcador en una jugada similar segundos después en otro pase a profundidad que no pudo concretar.

Los saudíes encontraron premio a su dominio en el tramo final de la primera mitad en dos penales, de los cuales sólo pudieron aprovechar uno. Al minuto 39, una mano de Ahmed Fathy al proteger un centro lateral provocó un penal que ejecutó Fahad Al Muwallad y que El Hadary desvió de su arco.

En el tiempo añadido, Ali Gabr sujetó a Al Muwallad dentro del área y el árbitro colombiano Wilmar Roldán señaló penal. El videoarbitraje ofreció al juez la posibilidad de revisarlo y reafirmó su primera decisión. Salman Alfaraj convirtió la pena máxima engañando al arquero egipcio, con lo que firmó la igualdad antes del descanso.

El guion fue similar en la segunda mitad, con escasas oportunidades de peligro en los arcos y con un ritmo más lento propiciado por las variantes de los técnicos. Sin embargo, hubo ocasión para que El Hadary volviera a lucir sus reflejos ante un doble intento saudita y para que Salah buscara su segundo tanto con timidez, demostrando que nunca llegó a sentirse totalmente cómodo en un torneo al que arribó sentido por su lesión en el hombro.

Cuando parecía que el marcador ya no se movería, Aldawsari aprovechó una pelota dentro del área en el último segundo del tiempo añadido para marcar el 2-1 con un buen remate cruzado.