Ciudad Juárez, Chih.

Aproximadamente 300 personas marcharaon la mañana de ayer a los juzgados federales y oficinas en El Paso, Texas, para protestar contra las políticas migratorias del presidente de Estados unidos, Donald Trump, que separa familias.

Esta marcha es para demostrar nuestro apoyo constante a las familias migrantes y lo seguiremos haciendo hasta que haya un sistema bien establecido para reunir a más de 2 mil niños con sus padres, dijo uno de los participantes.

Afirmó que es totalmente inhumano tener niños encerrados y separados de sus padres, incluyendo a los bebés.

Aunque se anunció que se quitarán cargos criminales a quien haya sido detenido en el ámbito de la ley migratoria, la política de tolerancia cero sigue vigente, pues no hay una agenda en la orden ejecutiva firmada por Trump que establezca si los niños serán criminalizados o si las familias serán encarceladas o detenidas juntas.

La manifestación comenzó en la Plaza de San Jacinto. El contingente fue integrado tanto por residentes de El Paso como de Nuevo México.

Para nosotros El Paso es nuestro hogar también y este problema es de todos, afecta a todos, por eso debemos alzar la voz, porque todos tenemos amigos inmigrantes de primera o segunda generación. No debemos callarnos ante esta injusticia, manifestó Austin Trout, residente de Las Cruces, Nuevo México.

El grupo de manifestantes caminó por la avenida Montana y la calle San Antonio hacia el edificio de la Corte Federal, y detuvo su marcha frente al centro de detención del condado de El Paso, donde hablaron en conz alta con el propósito de que las personas detenidas pudieran escucharlos.

¡Estamos luchando, familias por familias!, repetían las madres y padres que se dieron cita junto a una gran cantidad de niños.

Después de cantar Cielito lindo y de realizar una oración colectiva, la marcha regresó a la Plaza de Los Lagartos, vigilada de cerca por discreta presencia policial.