José Antonio Meade, candidato presidencial de la coalición Todos por México (PRI, PVEM y Panal), calificó de miserable la política de cero tolerancia aplicada por Donald Trump a los migrantes mexicanos. Poco antes de que el presidente de Estados Unidos diera marcha atrás a la separación de familias, le exigió suspender esa crueldad.

Meade sostuvo en Twitter que el llanto desgarrador de niños que han sido separados de sus padres conmueve y mueve a la comunidad internacional. Dijo que como padre de familia, mexicano y candidato a la Presidencia, se sumó al clamor de que Trump ponga fin a esa práctica.

El ex secretario de Hacienda hizo ayer proselitismo en Veracruz, donde aseguró que en la recta final de la campaña, su equipo está más preocupado por ganar sufragios que por los sondeos. Vamos a ganar, dijo al arribar al puerto.

El abanderado se reunió con la estructura priísta en la entidad y con representantes de etnias de la sierra. Teníamos conocimiento de que iba a ser una elección difícil, complicada, pero sabemos que en el corazón de esta elección complicada contamos con el mejor ejército, dijo ante militantes en el puerto jarocho.

En el municipio de Zongolica, aseguró que su proyecto garantiza a las familias que sus hijos van a tener una mejor oportunidad, van a recibir un mejor país que el que nosotros tuvimos; les pedimos que nos ayuden.

Asimismo, demandó: apostemos en Veracruz a la experiencia, al trabajo honesto, a la unidad, a quien podemos encargar con certeza el presente del país, su futuro.

De acuerdo con Meade, “juntos, en equipo, Antorcha Campesina, los verdes y Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado, los petroleros, maestros, comunidades indígenas y candidatos van a ganar el primero de julio a fin de trabajar hasta hacer realidad lo que han comprometido en las campañas”.

Ofreció servicios para los habitantes del estado, a quienes de ganar los comicios no faltarán agua, luz y drenaje. Dijo que ese compromiso queremos que se escuche claro, porque habremos de regresar muchas veces hasta estar seguros de que se cumplió.