El Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (Ceesp) manifestó que la mayoría de las propuestas que los candidatos presidenciales expusieron durante el tercer debate fueron sobre crear, ampliar o fortalecer programas sociales asistencialistas para reducir la pobreza en México, pero no explicaron de dónde obtendrán recursos para instrumentarlos.

¿Qué capacidad tendrán las finanzas públicas para dotar los recursos necesarios sin modificar la política tributaria, es decir, sin incrementar ni crear impuestos ni hacer uso de deuda adicional?, cuestionó el organismo en su análisis semanal.

Recordó que sólo 20 por ciento de 5.5 billones de pesos previstos para el gasto público de 2019 es susceptible de ajustes, porque la mayoría se destina para pagar el costo financiero de la deuda, participaciones federales, pensiones, nómina de los funcionarios públicos, Instituto Mexicano del Seguro Social, Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado y otros gastos comprometidos.

Las propuestas requieren mucho dinero

Se debe tener claro, dijo, cuánto puede gastar el nuevo gobierno sin sacrificar los ingresos, porque los planteamientos de los candidatos requieren fuertes cantidades de dinero para becas, subsidios y aumento del apoyo para adultos mayores y madres solteras.

El organismo alertó que a lo largo del proceso electoral el homicidio político ha cobrado tal fuerza, que 114 precandidatos y candidatos a diferentes puestos de elección popular han sido asesinados, lo que hará históricos estos comicios, aunado a que 2017 ha sido, hasta ahora, el año más violento en la historia de México por el número de crímenes cometidos.

Las ejecuciones de precandidatos y candidatos indican el interés que tienen las organizaciones criminales en los comicios, con el objetivo de proteger sus intereses. La preocupación es que hasta ahora la importancia que las autoridades responsables han dado al tema es mínima. Destacan más temas triviales, como las descalificaciones entre abanderados, que la preocupación por fortalecer los sistemas de seguridad pública para toda la población, fustigó el organismo.

El Ceesp lamentó que aunque en el tercer debate los candidatos presidenciales tuvieron que presentar sus propuestas para lograr el crecimiento económico del país, abatir la pobreza y la desigualdad entre la población, así como atender los temas de salud y educación, no hubo claridad en la forma en que se intenta estimular la inversión y el crecimiento. Dijo que los programas asistencialistas, más que reducir la pobreza, contribuyen a perpetuarla.

Uno de los asuntos más relevantes que tendrá que enfrentar el nuevo gobierno es lograr finanzas públicas sanas y responsables, que contribuyan a estimular la inversión, el crecimiento y el empleo, lo cual es la principal manera de reducir la pobreza, subrayó.

Reconoció que otro tema prioritario para quien gane las elecciones será el combate a la corrupción, la impunidad y la inseguridad, factores que se han fortalecido en México inhibiendo el crecimiento y representando un elevado costo para empresas y familias, porque afectan sus ingresos y capacidad de consumo.