Buenos Aires

En un fin de semana tenso en el que el dólar se disparó a casi 29 pesos, a pesar de la salida del presidente del Banco Central de Argentina, Federico Sturzenegger, y su cambio por el ex ministro de Finanzas Luis Caputo, el presidente Mauricio Macri anunció la noche de este sábado el desplazamiento de dos ministros clave de su gobierno: el de Energía, Juan José Aranguren, y Francisco Cabrera, de Producción, aunque esto no supone ningún cambio en su rechazada política económica ni en la grave crisis que vive el país.

El cambio de ministros, cuya renuncia están pidiendo desde hace tiempo la ciudadanía, pone en evidencia el fracaso de lo que el presidente Macri presentó al iniciar su gobierno (10 de diciembre 2015) como el mejor equipo de los últimos 50 años.

No son los únicos cambios en los dos años y medio de gobierno, varios funcionarios se alejaron, entre ellos el ex ministro de Economía Alfonso Prat Gay, cuando se decidió desdoblar esa cartera en Hacienda y Finanzas. Esta última ya no existe, porque el ex periodista Nicolás Dujovne ahora maneja ambos ministerios.

Ante estos cambios en el gabinete en horas recientes, y el hecho de que la administración quedará bajo el control general del Fondo Monetario Internacional (FMI), y considerando que los remplazantes de Aranguren y Cabrera; el ex director de Vialidad Nacional Javier Iguacel, y Dante Sica, respectivamente, continuarán la misma política, los bloques opositores del Frente para la Victoria-Partido Justicialista (FpV) y del Frente Renovador exigirán un cambio en el rumbo económico y se demandará que el acuerdo con el FMI pase por el Congreso, que es el que debe analizar las cuestionadas concesiones del gobierno de Macri.

Acusan al presidente de apelar al gatopardismo, de cambiar algo para que nada cambie, señalando que Sica no va a empezar una política de aliento a las exportaciones, de freno a las importaciones o de aliento a la industria y a la producción, y que además, no se van a volver atrás las tarifas que tanto descontento social han generado, sostuvo en un comunicado el diputado Agustín Rossi, del FpV.

Esto ocurre en momentos en que las encuestas revelan que sólo 30 por ciento apoya a Macri, mientras 70 por ciento lo desaprueba.

El analista económico Alfredo Zaiat sostiene que el gobierno de Macri corre contra reloj para evitar un descalabro mayor, cuando ya es la crisis cambiaria más importante desde el estallido de la convertibilidad por la magnitud de la devaluación y pérdida de reservas, y también recuerda que el próximo 19 de junio hay otro mega vencimiento de Lebac, la bomba que dejó la conducción frívola e incompetente de Sturzenegger-Lucas Llach en el Banco Central.

Asimismo, advierte que la economía quedará bajo la tutela general del FMI a cambio de esos dólares que inicialmente eran para brindar una chance electoral al macrismo el año próximo y hoy se revelan como indispensables para evitar un descontrol económico inmediato, y que cada una de las medidas fiscales, monetarias y cambiarias será auditada por el FMI, además se supervisará la política económica de más ajuste del gasto público, más tarifazos y comienzo del remate del Fondo de Garantía Sustentable de la Administración Nacional de la Seguridad Social para pagar jubilaciones, además de que los técnicos encargados de la vigilancia también recibirán información diaria, semanal y mensual de las principales variables.

Deberán también ser consultados en forma continúa sobre la marcha de las metas establecidas y la Junta Ejecutiva del FMI evaluará cada trimestre, desde la primera revisión del 15 de septiembre próximo, si continúa con la línea de asistencia financiera”