Luis Alberto José Gaspar, El Tongo, presunto integrante de Guerreros Unidos que obtuvo el auto de libertad de un juez federal, fue el primer detenido por la Fiscalía General del Estado de Guerrero por la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, que condujo a la aprehensión de otras tres personas, con las que comenzaron a indagar el ataque a los estudiantes.

Hubo contradicciones en sus testimonios sobre el destino final de los estudiantes, y, aunque el juez primero de distrito en procesos penales de Matamoros, Tamaulipas, ordenó la libertad de las cuatro personas, tres continuarán en prisión porque tienen procesos pendientes por otros actos ilícitos; no así El Tongo, que sí obtuvo su libertad al no acreditársele el de delincuencia organizada.

De acuerdo con la indagatoria DACP/0207/2014 iniciada por la fiscalía estatal, José Gaspar El Tongo fue el primero en la cadena de detenidos. En su declaración del 4 de octubre de 2014 reconoció haber ingresado a Guerreros Unidos en febrero de ese año como halcón en el grupo de Los Tilos, al servicio de Osiel Benítez Palacios.

Integrantes de dicho grupo, que controlaba la plaza en Iguala y Cocula para Guerreros Unidos, fueron agredidos la mañana del 26 de septiembre de 2014 cuando se encontraban en un autolavado; según las declaraciones, el ataque fue orquestado por miembros de Los Rojos, quienes viajaban en una camioneta supuestamente con estudiantes de Ayotzinapa. La noche de ese día ocurrió el ataque y la desaparición de los normalistas.

Marco Antonio Ríos Berber, El Cuasi, declaró que fue a comprar diésel por instrucciones de El Chuky para incinerar a un grupo de estudiantes; con la información aportada, la fiscalía llegó a una fosa en la que se localizaron restos de 28 personas. Sin embargo, con los peritajes se descartó que pertenecieran a los estudiantes; es decir, los restos que sí habían sepultado miembros de Guerreros Unidos eran consecuencia de eventos distintos a los de los normalistas.

Entre sus contradicciones, declaró que a las 18 horas del 26 de septiembre se enteró de la entrada de los normalistas a Iguala; no obstante, las evidencias que obran en el expediente de la PGR señalan que el grupo de estudiantes habría llegado a la estación de autobuses de Iguala entre las 20:30 y las 21:00 horas.

El Cuasi sostuvo que el destino final de los estudiantes fue Pueblo Viejo, donde los aventaron al hoyo y Gaby les roció diésel y también prendió fuego hasta que se calcinaron. Luego taparon el hoyo con tierra y ramas.

Sin embargo, Martín Alejandro Macedo Barrera, El Becerro, dijo que a 17 estudiantes les habrían dado muerte en la casa de seguridad de las Lomas, que El Chuky había dado la instrucción de darles piso.