Domingo 10 de junio de 2018, p. 21
Kabul.
Talibanes asesinaron a 40 efectivos de las fuerzas de seguridad de Afganistán en varios ataques, informaron ayer autoridades locales, al tiempo que líderes yihadistas anunciaron un alto el fuego de tres días a partir de 16 de junio con motivo del fin del Ramadán, aunque esa tregua no incluirá a las tropas de la coalición encabezada por Estados Unidos.
Los talibanes anunciaron su primer alto el fuego contra las fuerzas afganas desde la invasión estadunidense –en 2001–, dando un respiro a una población devastada por la guerra. La tregua tendrá lugar durante los primeros tres días de la festividad musulmana Eid al Fitr, que marca el fin del Ramadán.
Pocas horas antes del anuncio, los talibanes atacaron una base militar en la provincia de Herat, en el oeste, y un puesto policial en la región de Kunduz, en el norte, causando 36 decesos entre las fuerzas de seguridad del gobierno de Afganistán.
Se ordena a todos los mujaidines que detengan las operaciones ofensivas contra las fuerzas afganas durante tres días para el Eid al Fitr
, comunicó el grupo extremista en un mensaje de WhatsApp enviado a periodistas. Los talibanes advirtieron que sus combatientes se defenderán con fuerza
si son atacados, dos días después de que el gobierno afgano dio a conocer una interrupción de los combates durante dicha fiesta religiosa.
El mensaje del gobierno
El jueves anterior el mandatario afgano, Ashraf Ghani, dio a conocer un alto el fuego unilateral para la fiesta Eid al Fitr y dijo no saber si los talibanes lo aceptarían. En el anuncio, televisivo, Ghani precisó que la tregua comenzará el lunes, vigésimo séptimo día del Ramadán, y continuará hasta el quinto día del Eid al Fitr
, lo cual significaría más o menos una semana, probablemente del martes 12 al 19 de junio.
Ghani explicó además que esa decisión, sin precedente, respondió a una determinación de ulemas afganos. El lunes, miles de dignatarios religiosos de 34 provincias del país, reunidos en Kabul, publicaron un decreto de siete puntos, en el cual señalaron que los ataques suicidas y las explosiones son contrarias al islam y pecado capital
.
En tanto, el general estadunidense John Nicholson, comandante de las fuerzas de la Organización del Tratado del Atlántico Norte en Afganistán, anunció que honrarían
la tregua, de la que estaba excluida la lucha antiterrorista
.