El peso perdió terreno frente al dólar por segunda semana consecutiva. El escalamiento de las diferencias comerciales entre Estados Unidos, Canadá y México, socios en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), una menor demanda de monedas de países emergentes y la cercanía del proceso para renovar la Presidencia, para el que faltan tres semanas, fueron las principales causas que explican la depreciación de la moneda.

Ayer, el tipo de cambio para operaciones de mayoreo, las más representativas del mercado de divisas, cerró en 20.37 pesos por dólar, una recuperación de 16 centavos respecto del jueves, pero 49 centavos arriba del nivel registrado el viernes de la semana pasada, una depreciación de 2.3 por ciento, de acuerdo con el Banco de México.

En las ventanillas bancarias, el dólar se vendió ayer hasta en 20.99 pesos, 12 centavos más que el jueves, como fue el caso de BBVA Bancomer; y en 20.75 pesos, igual que la víspera, en Citibanamex.

Las presiones al alza para el tipo de cambio durante la semana estuvieron relacionadas con la incertidumbre sobre el futuro de la renegociación del TLCAN, pues se confirmó que se aplazarán hasta 2019, por lo que la ratificación del nuevo acuerdo quedará en manos de una nueva administración federal en México y de un nuevo Congreso en Estados Unidos, comentó Gabriela Siller, directora de análisis del Banco Base.

Al cierre de la semana, las pérdidas del peso también se debieron a una menor preferencia por divisas de economías emergentes, ante el regreso de la aversión al riesgo en los mercados financieros globales, dijo.