Los meseros del Vespertine trabajan con coreografías
cambiar el curso del negocio moderno
Lunes 4 de junio de 2018, p. 43
Los Ángeles.
En Vespertine, un restaurante que se ha convertido en un fenómeno en Los Ángeles, todo ha sido organizado para estimular los cinco sentidos, no sólo las papilas gustativas.
Todas las salas están embuidas en un olor, cuyos ingredientes se exhiben en el vestíbulo, invitando a un recorrido olfativo
. Los cocineros usan delantales de telas de samurái. Los platos y los cuencos están hechos de piedra volcánica. Los camareros, de riguroso negro, se mueven en una milimetrada coreografía para dirigirse a los asistentes inclinándose y abriendo teatralmente las manos.
Hemos creado un mundo en el que tú ingresas. La idea es que entres y lo recorras como te parezca
, explica el chef Jordan Kahn, de 34 años, con aspecto de estrella de rock, la cabeza rapada de un costado y pelo largo azabache del otro.
Ocupando al primer lugar de la prestigiosa lista del crítico Jonathan Gold desde su apertura el año pasado, esta ambiciosa propuesta quiere cambiar el curso de los restaurantes modernos
.
Propuestas
En una escena gastronómica en plena ebullición de Los Ángeles, Vespertine forma parte de una nueva generación de restaurantes que quieren ofrecer una inmersión
, como Dialogue, que promete una experiencia jugando con los sentidos y las emociones
, o El Somni.
Incluso veteranos como Wolfgang Puck, a la cabeza de un imperio gastronómico, no quieren dejar pasar la ola: su Rogue Experience, que propone cenas intimistas para ocho personas, quiere mover las fronteras del futuro culinario
.
Para Jordan Kahn, todo comenzó cuando descubrió un extraño edificio de vidrio con una fachada cuadriculada de hierro oxidado en un enclave del barrio de Culver City.
Fascinado, Kahn se puso en contacto con el arquitecto Eric Owen Moss para proponerle una colaboración y luego invitó a otros artistas, ceramistas, diseñadores, músicos a participar en el proyecto. Dice que sus obras han influido en los platos, y no al revés.