Los pasantes de enfermería estaban acompañados por otra joven
Señas de violencia en el domicilio donde el comando perpetró el ataque
Sábado 2 de junio de 2018, p. 4
Ciudad Juárez, Chih.
El comando que privó de la libertad a tres estudiantes de enfermería que hacían su servicio social en el hospital materno-infantil del municipio de Parral se llevó a una cuarta joven que continúa desaparecida, informó la Fiscalía General del Estado (FGE) en la zona sur.
El rapto de Merari Muñoz Lozano, de 18 años, quien estaba con los tres pasantes levantados entre domingo y lunes pasados, ocurrió también el primer día de la semana, dijo su hermana.
El lunes pasado Merari fue invitada a una fiesta por Mayra Mendoza, quien fue secuestrada junto con Sigrid Díaz y Oswaldo Galván en el domicilio que rentaban en la colonia Kennedy en Parral.
Los tres estudiantes inicialmente raptados son originarios de Ciudad Jiménez.
La FGE emitió un comunicado para informar que elementos de la Agencia Estatal de Investigación efectúan las indagatorias en torno a la privación de la libertad de un hombre y tres mujeres con domicilio en la colonia Kennedy, en Parral.
La denuncia fue interpuesta el miércoles en la fiscalía de distrito zona sur por familiares de Sigrid Casandra Díaz Huerta y Oswaldo Galván Rodríguez, de 21 y 22 años.
Versiones oficiales señalan que en el inmueble en que habitaban y del cual fueron levantados hubo forcejeo entre los captores y los hoy desaparecidos, ya que el domicilio se encontró desordenado y con restos de sangre.
Los jóvenes son estudiantes de la escuela de Enfermería José Pablo Meuchi, de ciudad Jiménez; pero prestaban su servicio en el hospital de ginecobstetricia de dicho lugar y de la cuarta víctima de desaparición no saben si también es estudiante.
En el mismo Parral familiares de nueve jóvenes desaparecidos a finales de septiembre de 2015, cuando fueron a trabajar en el poblado El Vergel, municipio de Balleza, demandaron localizarlos con vida. En el gobierno de César Duarte y en el actual, de Javier Corral Jurado, la FGE no hizo nada por ubicarlos.
Simón Orozco Quiñónez y Roberta Terán denunciaron que cuando se enteraron de que cinco de sus familiares, entre hijos y nietos, están entre los nueve desaparecidos, acudieron a las oficinas de la fiscalía zona sur para solicitar su búsqueda.
Luego de que les admitieron la denuncia en la Unidad de Personas Ausentes de la FGE abandonaron la búsqueda de los jóvenes en menos de un mes.
Se trata de los hermanos Eduardo, Nicolás y Antonio Orozco Terán; los nietos Jesús Miguel Vargas Orozco, Luis Ángel Orozco Mares, mientras que los otros cuatro jóvenes son Joel Chaparro Bujanda, Salvador Alejandro Vázquez Valerio, Antonio Núñez y Norberto Ramírez Molina.