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Impone el país impuestos a productos estadunidenses por 4 mil mdd, monto de la afectación

Trump grava acero de México; la SE contrataca con aranceles a EU

Minimiza Ross advertencias de represalias y llama a sus socios a seguir las negociaciones

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El secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, rechazó que haya un escalamiento del conflicto con su socio de Norteamérica. “Sólo se trata –aclaró– de una acción para empatar el tablero” y aseguró que el gobierno federal está dispuesto al diálogo y la negociaciónFoto Notimex
 
Periódico La Jornada
Viernes 1º de junio de 2018, p. 22

Washington.

Estados Unidos anunció ayer que aplicará aranceles a las importaciones de aluminio y acero desde México, Canadá y la Unión Europea, medida que pone fin a una exención de dos meses y alista el escenario para una guerra comercial.

El secretario de Comercio estadunidense, Wilbur Ross, informó en una teleconferencia con periodistas sobre la entrada en vigor de una tasa de 25 por ciento a las importaciones de acero y de 10 por ciento a las de aluminio a partir de la medianoche del viernes.

Ross subrayó que como presidente, Donald Trump, tiene la autoridad para modificar los aranceles o imponer cuotas o hacer lo que quiera en cualquier momento, lo que permite una potencial flexibilidad para resolver el problema.

Además, Ross restó importancia a las amenazas de represalias e indicó que las conversaciones pueden continuar incluso en medio de la disputa para tratar de encontrar una solución.

Esperamos continuar las negociaciones con México y Canadá, por un lado, y con la Comisión Europea, por otro, porque hay otros asuntos que también deben ser resueltos, afirmó.

Respecto de los dos primeros, Ross mencionó que la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte se ha demorado más de lo previsto y que no existe una fecha precisa para concluirla.

Previamente, en entrevista para el diario francés Le Figaro, que fue publicada ayer, Ross advirtió a la Unión Europea del riesgo de que haya una escalada rumbo a una guerra comercial si se niega a negociar sobre la imposición de aranceles.

Trump ha dicho que los aranceles forman parte de un esfuerzo para proteger a la industria y los trabajadores estadunidenses de una competencia internacional injusta.

Los socios comerciales de Estados Unidos habían exigido que las exenciones se prorrogaran o se hicieran permanentes.

Corea del Sur negoció una cuota para el acero, mientras Argentina, Australia y Brasil acordaron limitaciones en el volumen que pueden enviar a Estados Unidos en lugar de aranceles, explicó Ross.

La industria automotriz de Estados Unidos advirtió que los aranceles a metales encarecerán los automóviles y amenaza rán los puestos de trabajo.

Según declaraciones publicadas por Bloomberg, los representantes de las automotrices señalaron además que los aranceles desacelerarán la adopción de tecnologías de seguridad y de ahorro de combustible.

Estas tarifas resultarán en un aumento en el precio del acero producido en el país, amenazando la competitividad global de la industria y elevando los costos de los vehículos para nuestros clientes, declaró Gloria Bergquist, portavoz de la Alianza de Manufactureros Automotrices.

Aumentarían los costos para un rango de fabricantes, afectando potencialmente a los niveles generales de precio y podría provocar medidas de represalia dañinas para ciertos exportadores estadunidenses, afirmó el director gerente de Moody’s, Atsi Sheth.

Niega Guajardo que sea guerra comercial; Washington se da un balazo en el pie, resalta

Susana González G.

Como represalia comercial contra Estados Unidos, México impondrá aranceles a productos que importa desde ese país, pero sólo tres son de acero y cinco alimentos (piernas de puerco, manzanas, quesos, arándanos y uvas), entre otros, para compensar la afectación económica por 4 mil millones de dólares que ocasionarán los aranceles anunciados por el gobierno del presidente Donald Trump a las importaciones de productos nacionales de acero y aluminio.

El secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, rechazó que se trate del inicio de una guerra comercial contra su principal socio, al señalar que no hay un escalamiento del conflicto. Sólo se trata, aclaró, de una acción para empatar el tablero y aseguró que el gobierno federal está dispuesto al diálogo y la negociación.

México reprueba categóricamente la decisión de Estados Unidos... Consideramos que este criterio no aplica con socios de América del Norte. No hay justificación y representa una amenaza real a industrias altamente integradas de la región, declaró el funcionario en conferencia de prensa en París, Francia, donde permaneció toda la semana para participar en reuniones ministeriales de las organizaciones para la Cooperación y Desarrollo Económicos y Mundial de Comercio.

Admitió que el nuevo conflicto tensa la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y resultará muy difícil alcanzar un acuerdo antes de las elecciones en México el primero de julio,

Estados Unidos se está dando un balazo en el pie porque el acero y el alumino son utilizados por toda la industria y contribuyen a la competitividad e integración de América del Norte, sostuvo Guajardo en entrevistas.

Criticó que el gobierno del presidente Trump se justifique con un criterio de seguridad nacional, cuando México es el principal comprador de aluminio y el segundo de acero de Estados Unidos, con el cual tiene un déficit de 2 mil 400 millones de dólares.

Daño millonario

Los aranceles anunciados por Estados Unidos implican una afectación de 4 mil millones de dólares, lo que representa apenas 1.7 por ciento de los 500 mil millones de dólares a los que asciende el intercambio comercial con México, precisó Guajardo.

Comentó que una hora antes del anuncio oficial de Estados Unidos, se enteró de la decisión pese a que tanto el martes como el miércoles se entrevistó en París con el secretario de Comercio y el representante comercial de ese país, Wilbur Ross y Robert Lighthizer, a quienes insistió en que no tomaran dicha medida, porque México respondería.

“Ayer me dormí con Wilbur Ross, ahora me dormí con Lighthizer, cuando confirmaron que la medida venía en este sentido… La decisión ya estaba tomada y sólo respondieron ‘no se preocupen, a lo mejor va a ser corto, porque vamos a seguir dialogando’”, dijo el secretario.

Minutos después de que se oficializó el anuncio, la Secretaría de Economía (SE) informó que México responderá con medidas equivalentes a diversos productos, como aceros planos (lamina caliente y fría, incluidos recubiertos y tubos diversos), lámparas, piernas y paletas de puerco, embutidos y preparaciones alimenticias, manzanas, uvas, arándanos, diversos quesos, entre otros, hasta por un monto equiparable al grado de la afectación.

Definirán cobro fiscal

El detalle de los productos o fracciones arancelarias se publicará la próxima semana, resaltó Guajardo, y justificó que no se impondrán aranceles a todos los productos de acero importados desde Estados Unidos para no cometer el error de afectar nuestra competitividad en la integración de la industria internacional, ni tampoco impactar la inflación o consumo nacional. Se busca, dijo, compensar el impacto económico que provocarán los aranceles estadunidenses, así como buscar alternativas para importar esos produc-tos de otros países, como la manzana de Canadá.

Guajardo admitió que los productos seleccionados son políticamente sensibles en ciertas regiones de Estados Unidos, cuya población y legisladores tienen voz y voto en su Congreso y han advertido al presidente Donald Trump de los riesgos de tomar medidas proteccionistas.

Nadie gana con los aranceles, insistió, pero confió en que sean temporales y estarán vigentes hasta que Estados Unidos elimine los que impuso a México. Este jueves 31 de mayo, dijo, fue un triste día para el comercio internacional, pero el país tuvo que responder de manera contundente a esta acción totalmente ofensiva del gobierno de Trump.