Martes 29 de mayo de 2018, p. 10
Renato Sales, titular de la Comisión Nacional de Seguridad, afirmó que el Estado enfrenta nuevos desafíos, como la extrema pobreza y la exclusión social, los cuales fomentan la radicalización y ponen en riesgo la estabilidad de la democracia. No obstante, se les hace frente con una nueva agenda de seguridad nacional, la cual tiene un enfoque integral y coloca en el centro al ser humano.
En el foro Hacia una política de Estado en seguridad nacional en México, donde acudió en representación del secretario de Gobernación, Alfonso Navarrete Prida, aseguró que la estrategia no se concentra solamente en la protección del Estado, además de que tiene un nuevo carácter preventivo y multidimensional.
Tomás Zerón, secretario técnico del Consejo de Seguridad Nacional de la Presidencia de la República, planteó en el acto que en la materia se han privilegiado asuntos estratégicos mediante una política capaz de hacer frente a cualquier amenaza contra la estabilidad nacional.
Al referirse a los problemas registrados en días pasados con transferencias electrónicas de dinero, Zerón comentó que también hay estrategias de ciberseguridad, de seguridad de la información y políticas de ciberdefensa, las cuales se pusieron en marcha, además de que se formalizaron protocolos para mejorar la seguridad financiera del Estado.
Otras amenazas que se enfrentan a diario son: delincuencia organizada trasnacional, tráfico de drogas ilícitas, lavado de dinero, tráfico ilícito de armas y trata de personas, entre otras.
Por su parte, el comisionado Sales agregó que los nuevos desafíos exigen atención para garantizar la seguridad del Estado. De ahí la redefinición de la seguridad nacional, la cual exige una profunda responsabilidad y una nueva visión.
Para el secretario de Comunicaciones, Gerardo Ruiz Esparza, la seguridad nacional es una responsabilidad compartida. Coincidió en la importancia de tener una visión multidimensional originada por el acelerado contexto político y tecnológico.