Se comprueba el uso de una caja B que pagó un salario ilegal a Rajoy cuando fue ministro
La trama operó en el partido durante 20 años
Culmina el juicio en España contra 37 acusados
Viernes 25 de mayo de 2018, p. 27
Madrid.
La corrupción en España se saldó este jueves con una sentencia en la que por primera vez en la historia se condena a un grupo político (el derechista Partido Popular, PP) por haberse beneficiado
de una trama política y empresarial que perpetró un desfalco millonario al erario.
El PP tendrá que pagar una multa de 245 mil euros (6 millones de pesos), mientras Luis Bárcenas, quien fue su gerente durante dos décadas, fue sentenciado a 33 años de cárcel y a pagar una multa de 44 millones de euros (mil 100 millones de pesos), mientras el líder de la red mafiosa, el empresario Francisco Correa, tendrá que cumplir una condena de 51 años de prisión.
La red de corrupción que se tejió a finales del siglo XX y que operó, al menos, durante 20 años en torno al PP y los empresarios afines
, finalmente fue sentenciada luego de un juicio que se prolongó más de cinco años.
El caso Gürtel tiene varias ramificaciones, pero grosso modo funcionaba con un grupo de empresarios que pagaba comisiones a cambio de contratos públicos, y una serie de funcionarios, dirigentes políticos y altos mandos del PP que lucraban con ello. La red operó sobre todo en Madrid, Valencia, Murcia, Islas Baleares y Castilla y León, y se fortaleció sobre todo en la época en la que gobernó el fundador del PP, José María Aznar, que ni siquiera fue imputado, aunque sí tuvo que testificar en varios de los juicios de esta trama corrupta.
Las condenas son las más duras en la historia de la democracia española en un caso de corrupción política. Los dos principales responsables son el empresario que dirigía la trama, Francisco Correa, y el ex gerente y ex senador del PP Luis Bárcenas, quien además diseñó una contabilidad secreta del partido para el enriquecimiento personal y para el financiamiento irregular de las numerosas campañas políticas en las que participó el PP durante dos décadas.
Correa fue condenado a 51 años y cuatro meses de cárcel; el también empresario Pablo Crespo, a 37 años y medio; Luis Bárcenas, a 33 años y una multa de 44 millones de euros; Rosalía Iglesias, la esposa Bárcenas, a 15 años; Guillermo Ortega, ex alcalde del PP de la localidad madrileña de Majadahonda, a 38 años; Alberto López Viejo, ex consejero de Presidencia de la Comunidad de Madrid, a 31 años; Jesús Sepúlveda, ex alcalde de Pozuelo, a 14; Ana Mato, ex ministra de Sanidad del gobierno español, tendrá que pagar una multa de 27 mil euros; Gema Matamoros, esposa del ex alcalde Majadahonda, multa de 45 mil euros; José Luis Izquierdo, 17 años de cárcel; Isabel Jordán, condenada a 14 años de prisión; Javier Nombela, a tres años; Alicia Mínguez, tres años y seis meses; Ricardo Galeote, siete años y 10 meses de cárcel; Carmen Rodríguez Quijano, a 14 años; Juan José Moreno, a 15 años; José Luis Peñas, a cuatro años, y ocho personas más enfrentan penas de entre dos y 10 años de cárcel. En total fueron 37 acusados.
En el expediente de la sentencia, de más de mil 700 páginas, también se condenó al PP por un delito de corrupción a título lucrativo
, por lo que su sentencia es puramente económica y tendrá que pagar una multa de 245 mil euros.
El fallo reconoce la existencia de una caja B en el Partido Popular, desde al menos 1989, consistente en una estructura financiera y contable paralela a la oficial
, cuyas partidas se anotaban de manera informal. En este sentido, el tribunal se refiere a las hojas manuscritas redactadas por Luis Bárcenas y que reveló el diario El Mundo, en las que se hacían constar ingresos y gastos del partido, además de dinero entregado a miembros relevantes”, entre ellos el presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, quien supuestamente recibió un salario extraordinario e ilegal cuando fue ministro de Educación durante el gobierno de José María Aznar, y que incluso recibió ese dinero en su propio despacho y le era entregado en cajas de puros de la marca Cohiba.
Desde el PP se asumió con un nerviosismo y malestar una sentencia que, según anunciaron, piensan recurrir
.