El quintanarroense entrena en Chula Vista con Jeremy Fisher
sin presiónpor marca para Barranquilla
Sábado 12 de mayo de 2018, p. a15
En los Juegos Olímpicos de Río 2016, Alberto Álvarez conoció al entrenador estadunidense Jeremy Fisher, quien estaba sorprendido del finalista mexicano que comenzó a hacer su historia en el salto triple. Desde hace cuatro meses trabajan juntos en el Centro de Entrenamiento Olímpico de Chula Vista y lo aprendido en ese lapso se demostrará en el Nacional de Monterrey, donde el quintanarroense buscará dar la marca para ir a los Juegos Centroamericanos.
Primer finalista de México en esa prueba con el noveno lugar conseguido en la justa brasileña, el saltador de 27 años señala que no hay prisa, ni presión; es soltar el cuerpo y cumplir con ese requisito
, en el que le piden 16.70 metros, y asegura que puede dar eso y más, pero que prefiere reservarse para el compromiso en Barranquilla, donde es uno de los favoritos a las preseas.
Álvarez Muñoz salió del anonimato en Chetumal. Era entrenado por su padre por medio de videos. Tiene nueve años en el atletismo. Cuando llegó a la fi- nal olímpica, el saltador recibió la oportunidad de irse a Nuevo León, entidad que lo adoptó y le ha ofrecido todas las oportunidades para su desarrollo académico y deportivo en Monterrey.
Alberto se fue a San Diego en enero pasado para iniciar el proyecto a Tokio 2020.
Estar bajo la dirección de Fisher, uno de los mejores entrenadores
y formador de medallistas olímpicos y mundiales, lo motiva.
He visto avances con entrenamientos más técnicos, tengo más potencia y velocidad. Ahora doy ocho pasos (para el impulso) y en la carrera completa entre 16 y 20
, explica el atleta de 1.91 de estatura con marca personal de 16.99 metros.