Miércoles 25 de abril de 2018, p. 40
Ante el importante crecimiento que México ha tenido en décadas recientes en su planta de investigadores, es necesario que las universidades modernicen su funcionamiento para compartir su infraestructura en ambiciosos proyectos colectivos de investigación, señaló William Henry Lee Alardín, coordinador de la Investigación Científica de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Al participar en el foro Interunidades: la investigación en la Universidad Autónoma Metropolitana, presente y futuro, convocado por la rectoría general de la UAM, el especialista citó que el crecimiento de la planta docente en las universidades e instituciones de educación superior se quintuplicó en tres décadas, al pasar de 6 mil académicos inscritos en el Sistema Nacional de Investigadores (SNI) en 1990, a más de 28 mil en 2018.
Dijo que si bien este crecimiento ha sido considerable, por lo mismo es necesario modificar las estructuras y funcionamiento de las universidades, a fin de potencializar dicho crecimiento en beneficio de las instituciones y del país. Este aumento se dio con criterios en los que se fomentaba la investigación y la producción científica de calidad, pero probablemente sesgado al énfasis en la producción individual más que en la de grupo, sin alentar la infraestructura compartida
, dijo Lee Alardín.
Urgen metas colectivas
En el foro, realizado en las instalaciones de la rectoría general de la UAM, dijo que este es el momento de una transición y ser capaces de alcanzar metas colectivas, donde se aproveche cabalmente la infraestructura y el personal que se dispone. Un ejemplo, dijo, ha sido el financiamiento hecho por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) en la adquisición de equipos. Ya no es posible tener infraestructura muy cara para grupos pequeños.
Además, refirió que debido al tamaño de la economía nacional, pero también a la cantidad y talento de investigadores mexicanos, es necesario que las universidades tengan proyectos de 30 o 40 millones de pesos.
Explicó que la UNAM tiene dos experimentos
: el Centro de Cambio Global y Sustentabilidad en el Sureste, con la participación conjunta con el Conacyt, la Universidad Autónoma de Tabasco y el gobierno del estado, pro la cual se creó una asociación civil, y el segundo, el Instituto de Química de la UNAM, que es en convenio con la Universidad Autónoma del Estado de México.