El grupo mexicano Son con Caché, que dirige Guillermo Posada (Ciudad de México, 1958), ha sacado a la luz su nueva producción discográfica: Tenderly. Mis raíces en el son.

¿Por qué un título en inglés?, es una pregunta que suelen hacerle al pianista sonero. Posada contesta que tenderly –significa tiernamente en inglés–, se contrasta con el hecho de que la mayoría de grupos en la actualidad hablan casi de pura violencia y desgracias. Entonces, dije, hay que buscar otra cosa que no nos contamine tanto en este momento que vivimos.

Integrado por 12 números, todos con arreglos de Posada, los primeros tres –Tenderly, La Sandunga y Correo Español– fueron grabados en estudio y los restantes en vivo. El pianista fundó Son con Caché en 1993 y a lo largo de los años ha acompañado a personalidades soneras como Luis Ángel Silva Melón.

El entrevistado, de hecho, creció con la música de Lobo y Melón, el Conjunto Batachá y el Yímbola Combo, que considera sus raíces: Nosotros los mexicanos finalmente adoptamos una música que es antillana; sin embargo, en el país se toca desde hace muchos años. Es parte de nuestra vida, de nuestra historia.

Agradecido con la música

Posada agradece que “la música haya llegado a mi vida, ya que vengo de un barrio pesado, la Agrícola Oriental –ahora se calmó un poco–, porque había muchos campos, no estaba poblado, había pandillas. Muchos de nuestros amigos terminaron en la cárcel o muertos”.

Trabaja desde los nueve años. A los 13 ingresó a una editorial: El hijo de un fotógrafo me vendió una guitarra eléctrica que conectaba a la consola de mi abuelita. En una ocasión llegaron unos compañeros de Puebla e hicieron un grupo. Como vieron que tocaba la guitarra me invitaron. Allí empecé con la música.

El piano también llegó por accidente: Cuando el grupo se hizo más grande tuve una discusión con la persona que en ese momento lo dirigía, entonces invitó a un pianista y me hicieron a un lado. Al ver el piano empecé a sacar los acordes. Después fui a la Escuela Libre de Música y allí se inició la aventura con ese instrumento. Luego ingresé al Sindicato de Músicos, donde continué mis estudios.

Pero, ¿por qué el son cubano? A muy poco tiempo de tener el grupo salió el Acapulco Tropical y Rigo Tovar; sin embargo, escuchábamos las sonoras Matancera, Maracaibo y Veracruz. Las personas mayores oían a Rolando la Serie. Nunca he tocado rock, pero sí me gustaba mucho.

El entrevistado trabajó y aprendió de figuras soneras como Panchito Morales, Emilio Domínguez, Melón y Carlos Daniel Navarro Lobo. Considera que Melón fue quien más le enseñó: Era un sonero natural, pues. Me gustaba que era muy exigente. Muchos se han quejado de su carácter; sin embargo, me inclino más por el artista, por el legado que nos dejó, por todo lo que hizo por la música. De hecho no hay un sonero en México que haya hecho lo que él: grabar con la disquera Fania, codearse con los más grandes.

En Tenderly... participan: Arturo Arias (bajo y voz), Armando Huerta (timbal y voz), Sergio Aguilar (voz y tumbadoras), Enrique Vargas (trompeta), Ángel Altamirano (sax y flauta) y Guillermo Posada (piano y voz). El diseño es de Gerardo Samaniego y el master de Javier Hurtado. Para adquirirlo, se puede llamar al 044 551400 2621.