Querétaro, Qro.

Luis Alberto López López, chofer y testaferro del empresario Juan Manuel Barreiro, indagado por presunto lavado de dinero en favor del candidato presidencial Ricardo Anaya Cortés, entregó a la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), la nave industrial que estaba a su cargo.

Al filo de las 10:20 horas del viernes, un convoy de la Procuraduría General de la República (PGR) y la defensa legal de Luis Alberto López López, ingresaron a las instalaciones del Parque Tecnológico Innovación, ubicado en el municipio El Marqués, Querétaro.

En la nave industrial del lote 82, propiedad de la empresa Manhattan Master Plan Development S de RL de CV, la representación de la UIF desarrolló la diligencia, mientras 10 elementos armados de la Agencia de Investigación de la PGR resguardaron el lugar.

Manhattan tenía arrendado el inmueble a un particular, a quien la UIF y personal de la PGR le informaron que esa propiedad ya era del Estado.

Patricio Kegel Jacob, representante legal de Luis Alberto López, informó que el contrato de arrendamiento estará vigente y las rentas que paga una compañía, de la cual no reveló el nombre, serán entregadas de forma directa a Hacienda.

Dijo que la diligencia se efectuó para indicar a los arrendadores del inmueble que las instalaciones físicas fueron entregadas al Estado y dejan de ser propiedad de Manhattan como parte de un acuerdo reparatorio.

Con ese procedimiento, el abogado dio por cerrado el caso sobre la participación de su cliente, aunque la investigación por presunto lavado de dinero en que estaría involucrado Barreiro, ligado a Ricardo Anaya, continúa.

Luis Alberto López, quien se encontraba al lado de su representante legal, sólo dijo: Sin palabras, sin comentarios, por favor.

Kegel, rechazó que la PGR haya presionado a su cliente para tener un acuerdo reparatorio, además de señalar no tener conocimiento que la diligencia haya coincidido previo al debate de los candidatos a la Presidencia del domingo próximo.

Indicó que si bien su cliente era representante legal de Manhattan y ésta a su vez tenía contrato de arrendamiento con la compañía que actualmente ocupa el inmueble, desconoció desde qué fecha está arrendado, las cantidades del recurso, el tiempo del arrendamiento y a quién, por tratarse de temas empresarial y administrativo.

En el inmueble se pudo observar el nombre de la empresa japonesa Nissei que, de acuerdo con su página web, se dedica a la fabricación de máquinas de inyección de plástico.

Esta nave industrial fue vendida por el candidato presidencial Anaya Cortés a Manhattan Master Plan Development por 54 millones de pesos, después de que las tierras donde actualmente se encuentra el parque industrial eran propiedad del gobierno estatal.