Xalapa, Ver.

Seis policías y una persona no identificada murieron durante un motín en el penal de La Toma, en el municipio de Amatlán de los Reyes, que comenzó la noche del sábado y continuó hasta la madrugada del domingo.

El Grupo de Coordinación Veracruz informó que la noche del sábado se amotinó la población del penal después de que las autoridades trasladaron a cuatro internos de alta peligrosidad a un penal federal. Acotó que policías estatales, apoyados por agentes de Orizaba y de otras corporaciones ingresaron al centro penitenciario para efectuar el traslado.

Al ver a los policías, los reclusos se amotinaron. Seis agentes fueron agredidos y encerrados. El parte oficial indica que los internos prendieron fuego y provocaron que con el humo se intoxicaran y perecieran. Agregó que la Fiscalía General del Estado ya practicó los dictámenes periciales, que indican que la causa de la muerte de los policías fue asfixia por confinamiento. La otra persona que murió no estaba uniformada y al cierre de esta edición no había sido identificada.

Más policías ingresaron a la cárcel, pero fueron repelidos por reos que se apoderaron de herramientas de carpintería. Durante la gresca siete reos sufrieron lesiones, dos de ellos de gravedad. Un número no identificado de internos fue llevado a la enfermería del reclusorio con lesiones leves. Además, 15 policías fueron internados en hospitales de la región.

El secretario de Seguridad Pública, Jaime Téllez Marié, y el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares acudieron a La Toma e hicieron un recorrido la mañana de ayer, una vez que la situación estuvo bajo control.

Familiares de reclusos acudieron a exigir información. Pasaron varias horas antes de que se diera a conocer la lista de heridos y trasladados. Más de medio día después del motín, personal de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos llegó a la cárcel, que hasta ayer continuaba bajo resguardo de la Secretaría de Seguridad Pública.

Presuntos asesinos de periodistas, a penal federal

Uno de los cuatro reos trasladados de La Toma a un penal federal es Ángel N, alias La Paloma, detenido en septiembre pasado acusado de matar a un joven en el municipio de Cuitláhuac. También se le acusa de haber asesinado al periodista Ricardo Monlui Cabrera en el municipio de Yanga. Las autoridades lo vinculan con el grupo delictivo Los Zetas.

Otro de los transferidos es Manuel N, alias El Cachorro, acusado de delincuencia organizada, desaparición forzada de personas, tráfico de hidrocarburos y robos en carretera. Se le vincula al homicidio de la periodista Anabel Flores, perpetrado en 2015, y las autoridades lo identifican como jefe regional de Los Zetas en la zona de las Altas Montañas.

Josele N, señalado como jefe de plaza después de la detención de El Cachorro, también fue llevado a un penal federal. Se le acusa de robar gasolina a Petróleos Mexicanos, de robo de tractocamión en la carretera y del incendio del diario El Buen Tono, en noviembre del 2011. También se le vincula con el homicidio de Anabel Flores.

El cuarto integrante del grupo es José Rolando N, alias El Viejón, integrante de Los Zetas, arrestado en octubre de 2017 en la zona centro del estado. Se le atribuyen robo de vehículos, portación de arma de fuego, secuestros y diversos homicidios, entre ellos los de líderes cañeros.

Autoridades aseguraron que estos cuatro reos venían generando problemas graves de violencia en la zona conurbada de Córdoba-Orizaba y demás municipios de la región de las Altas Montañas. De igual manera, dieron a conocer que se decidió trasladarlos a un penal de alta seguridad debido a la cercanía del penal de La Toma con la zona donde operaban.