A una víctima pretendieron responsabilizarla por el homicidio de la corresponsal
Con esa pistola dieron muerte al piloto de la avioneta en que huyeron El Larry y sus cómplices
Lunes 26 de marzo de 2018, p. 5
Chihuahua, Chih.
Al asesinato de Miroslava Breach Velducea le rodearon entre marzo y diciembre de 2107 cinco homicidios más, y la pistola con la cual ella fue abatida se empleó en dos más: una de las víctimas fue un adulto mayor que se dedicaba a cuidar gallos y lo ultimaron para hacerlo pasar por el atacante de la periodista; otro caso fue el del presunto piloto de la avioneta en la que huyeron de la ciudad de Chihuahua dos participantes del ataque contra la corresponsal de La Jornada.
A esto se sumó la muerte de dos jovencitas en el momento en que se tomaban una selfie y el ala de una avioneta golpeó sus cabezas y sólo quedó como un incidente que fue mencionado en la nota roja de los diarios de Chihuahua.
El quinto asesinato fue el de Ramón Andrés Zavala, el hombre que disparó contra de Miroslava Breach.
El 23 de marzo, poco antes de la siete de la mañana, Ramón Andrés Zavala disparó una pistola calibre 38 en contra de la periodista y luego se escondió durante cuatro días en una casa propiedad la esposa de Juan Carlos Moreno, El Larry, señalado públicamente por las autoridades chihuahuenses como uno de los autores intelectuales del homicidio de la corresponsal de La Jornada.
El 24 de marzo, El Larry o El Wa, Jaciel Vega Villa –quien facilitó su auto para el traslado de Zavala a la casa de Miroslava– y uno de sus hermanos abordaron una avioneta con rumbo al municipio de Chínipas.
La nave buscó aterrizar sin contratiempos, pero en inmediaciones de la aeropista de Chínipas se realizaba una carrera de caballos.
Dos jovencitas se encontraban en el techo de una camioneta tipo pick up, estaban tomándose una selfie cuando el ala de la avioneta las golpeó. Las mujeres fueron identificadas como Nitzia Mendoza Corral, de 18 años de edad, y Clarissa Morquecho Miranda, de 17.
Nitzia era originaria de Navojoa, Sonora, y estudiaba el segundo semestre de la carrera de derecho en su tierra natal. Clarissa era del poblado de Palmarejo, ubicado a 40 minutos de Chínipas, y cursaba el sexto semestre de preparatoria en su localidad; ambas eran amigas.
Según testimonios recogidos por periodistas locales, de la aeronave descendió Juan Carlos Moreno Ochoa y dos hermanos Vega Villa. Minutos después del percance en el que las chicas perdieron la vida la avioneta volvió a elevarse.
Lo sucedido en Chínipas quedó registrado en las constancias ministeriales que fueron leídas durante las audiencias de vinculación a proceso contra El Larry por el homicidio de Miroslava Breach, y en las declaraciones ministeriales que obtuvo la Fiscalía General de Justicia de Chihuahua una testigo de identidad reservada dijo haber comentado lo sucedido con Jaciel Vega Villa en Chínipas, el 27 de marzo, cuando se alistaban para acudir a la feria del pueblo, pero no hay más datos de esa investigación.
El 16 de abril, el director de la Policía Estatal Única de Chihuahua, Óscar Aparicio Avendaño, declaró que con la misma arma utilizada en el ataque contra Miroslava Breach había sido asesinado el piloto que presuntamente habría trasladado a Juan Carlos Moreno y Jaciel Vega Villa a Chínipas.
El funcionario declaró que las investigaciones de campo habían establecido la relación de ambos casos tras el análisis de los cartuchos. De este caso, y aunque se conocen el nombre de la víctima y de la empresa para la que trabajaba, las autoridades no han dado a conocer mayores detalles.
El 18 de abril un hombre de la tercera edad que se dedicaba a cuidar gallos de pelea, identificado como Gabriel Ochoa, fue asesinado horas después de que el gobernador Javier Corral informó que los asesinos –intelectual y material– de Miroslava Breach habían sido identificados.
Junto con el cuerpo, las autoridades localizaron un arma calibre 38 y una cartulina supuestamente firmada por Arturo Quintana Quintana, El 80, líder del grupo delictivo La Línea, en la que supuestamente se mencionaba que la persona asesinada era quien había disparado contra la periodista y esa era el arma (la pistola sí fue la que utilizaron para agredir a la corresponsal de La Jornada).
Una semana después la autoridad estatal determinó que el mensaje encontrado junto al cadáver era un distractor, similar a la cartulina que los asesinos materiales de Breach Velducea dejaron a un lado de la camioneta de la periodista.
El 19 de diciembre, en Álamos, Sonora, fue localizado el cadáver de Ramón Andrés Zavala, identificado por la Fiscalía General de Chihuahua como el tirador que quitó la vida a Miroslava Breach Velducea.