Nueva York.

La actriz de cine porno Stormy Daniels afirmó que fue amenazada para callar sobre una presunta aventura con el presidente estadunidense, Donald Trump, en una entrevista para el programa 60 Minutes transmitida este domingo por la cadena CBS.

Stormy Daniels, quien busca librarse de un acuerdo de confidencialidad que firmó con el abogado de Trump, Michael Cohen, por 130 mil dólares días antes de la elección presidencial de 2016, dijo a CBS que tuvo sexo sin protección con el magnate en una ocasión en 2006, a unos meses de que Melania Trump diera a luz a su hijo Barron, y que fue amenazada por un hombre en un estacionamiento en Las Vegas cuando buscó vender su historia en 2011 a la revista In Touch.

“Estaba en un estacionamiento, en camino a una clase de ejercicios con mi hija pequeña (...) y un hombre se me acercó y me dijo: ‘Deja a Trump en paz. Olvida la historia’. Luego se inclinó, miró a mi hija: ‘Es una linda niña. Sería una lástima que algo le pasara a su madre’”, relató la actriz de 39 años, cuyo nombre real es Stephanie Clifford.

La experiencia dejó a Daniels temblando al grado que tuvo miedo de dejar caer a su bebé.

Agregó que después de su encuentro sexual en 2006 siguió en contacto con Trump. Pensé en esto como un trato de negocios, explicó, pues el magnate dijo que trataría de hacer que ella apareciera en El Aprendiz, el show que él dirigía en aquel momento.

Sobre sus motivos para hablar ahora, Daniels aseguró que no se veía a sí misma como víctima, sino que simplemente quería dejar las cosas claras. No estoy a gusto con que se me haga ver como una mentirosa, explicó.

Al preguntarle sobre qué le diría a Trump si él estuviera viendo la entrevista, aseveró: Él sabe que estoy diciendo la verdad.

Cohen ha dicho que no hubo una relación entre el presidente y Daniels, y que los 130 mil dólares los pagó él de su propio bolsillo. Ha asegurado que ni la Organización Trump ni el equipo de campaña fueron parte de la transacción con Daniels y que a él nunca le rembolsaron el monto que pagó.

Al cierre de esta edición no había comentarios de la Casa Blanca sobre la entrevista.

En otro tema, Trump no incorporará a otros dos abogados al equipo legal que lo representa en la investigación sobre la supuesta injerencia rusa, indicó el abogado del mandatario, Jay Sekulow.

En un comunicado señaló que los abogados de Washington, Joseph DiGenova y Victoria Toensing, tienen conflictos de interés que no les permitirán representar al presidente en relación con la investigación del fiscal especial Robert Mueller.

El anuncio se hizo horas después que Trump utilizó Twitter para rechazar los reportes sobre que tiene dificultades en añadir miembros a su equipo legal. El mandatario dijo que estaba muy contento con sus abogados actuales.

Muchos abogados y bufetes importantes quieren representarme en el caso de Rusia, escribió Trump, y agregó: la fama y la fortuna nunca van a ser rechazadas por un abogado, aunque algunos están en conflicto.

Ni el presidente ni Sekulow especificaron el conflicto relacionado con DiGenova y Toensing, quienes están casados y son socios legales, pero el bufete de la pareja ha representado a otros clientes en la investigación del fiscal especial, incluido el ex asesor de campaña de Trump Sam Clovis.

Sekulow dijo que Trump estaba decepcionado de que DiGenova y Toensing no lo representarán en la investigación, pero esos conflictos no impiden que asesoren al presidente en otras cuestiones legales.

Por otra parte, el nuevo asesor de Seguridad Nacional, John Bolton, intentó persuadir a Israel de atacar las instalaciones nucleares de Irán, aseguró Shaul Mofaz, ex ministro israelí de Defensa.

Conozco a John Bolton desde que era embajador de Estados Unidos ante la Organización de las Naciones Unidas, dijo Mofaz en una conferencia en Tel Aviv.

Intentó convencerme de que Israel tenía que atacar Irán, afirmó, citado por el sitio de noticias Ynet. Mofaz, fue ministro de Defensa entre 2002 y 2006 y antes jefe del Estado Mayor israelí, aseguró haberse mostrado en contra de una intervención militar contra Irán. Creo que no sería un paso inteligente, ni de los estadunidenses ni de nadie, hasta que la amenaza sea real, señaló.