La Organización de las Naciones Unidas (ONU) estima que en el mundo 6 mil millones de personas tienen acceso a un teléfono móvil y 95 por ciento de la población mundial vive en zonas con cobertura de red móvil al menos de 2G.

Lo anterior, afirma la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), permite hacer de los dispositivos móviles herramientas efectivas para reducir la brecha digital y educativa.

La organización estima que un libro electrónico puede ser hasta 500 veces más barato que su edición impresa y su penetración puede ser mucho mayor, frente a un déficit de materiales de lectura en muchas regiones del planeta, pues en Estados Unidos se estima que en las zonas más pobres hay un libro por cada 300 alumnos.

Al anunciar la Semana del Aprendizaje Móvil (26 al 30 de marzo), donde se abordará el uso de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) en la educación, el organismo multinacional recordó los múltiples desafíos que se enfrentan, como el acceso equitativo, pues las mujeres que usan Internet son 12 por ciento menos que los hombres.

La Unesco advierte que los grandes avances tecnológicos de los próximos 10 años tendrán una incidencia en las formas de trabajo y en las estructuras del mercado laboral, así como en otros aspectos de la vida, como la educación, la salud y la agricultura.

Lo anterior generará una reorientación profesional en lo relativo a las competencias de los adultos, como en la educación de jóvenes y niños. Es vital que todos los países logren anticipar la evolución de las necesidades en competencias digitales para el trabajo y la vida, a fin de poder definir las prioridades en materia de acciones políticas.

Antes del encuentro, que se realizará en su sede de París, Francia, la Unesco destaca que si bien el aumento en el acceso y la conectividad a la red permitieron el desarrollo de una economía digital global, existen grandes desigualdades que son la consecuencia de la falta de competencias digitales tanto en los países en vías de desarrollo como en los desarrollados.

Las competencias digitales, detalla el organismo, son aquellas que facilitan el uso de los dispositivos, las aplicaciones de la comunicación y las redes para acceder a la información y llevar a cabo una mejor gestión de éstas. Permiten crear e intercambiar contenidos digitales, comunicar y colaborar, así como dar solución a los problemas con miras al alcanzar un desarrollo eficaz y creativo en la vida, el trabajo y las actividades sociales en general.

La Unesco destaca que las competencias digitales básicas que permiten el uso elemental de los dispositivos y las aplicaciones en línea, así la lectura, la escritura y el cálculo, son parte esencial de la nueva gama de competencias en alfabetización durante la era digital.