Villa de Allende, Méx.

Los mazahuas tienen claro que no esperarán otros 14 años para que el gobierno federal cumpla sus compromisos de compensar a las comunidades del sur mexiquense por las afectaciones ocasionadas por la infraestructura del Sistema Cutzamala, el cual dota la tercera parte del agua que se consume diariamente en Ciudad de México y su zona conurbada.

A una semana de que instalaron un plantón afuera de la Planta Potabilizadora de Berros, en este municipio, los mazahuas han advertido que no cesarán en sus movilizaciones hasta lograr que el gobierno federal cumpla todos y cada uno de los compromisos firmados con la comunidad.

Hemos entendido que sólo cuando hay presión social, las autoridades trabajan. Si no nos movilizamos nos van a mantener en el olvido, afirmó Manuel Araujo, uno de los líderes del Frente Mazahua en Defensa de la Tierra y el Agua.

Si en 2004 iniciamos un plantón que duró 435 días, con movilizaciones que nos llevaron a cerrar las válvulas del Cutzamala, hoy tenemos más fuerza y disposición para hacer lo necesario para que cumplan sus compromisos, advirtió.

En 2005, los mazahuas convinieron con el entonces secretario del Medio Ambiente que año con año se pagara a los nativos por los daños que provocan los escurrimientos de la presa de Villa Victoria y del canal Martínez de la Meza, el cual inunda más de 300 hectáreas de cultivo, y también que se les dotara de agua potable, pero ni les pagan ni las redes hidráulicas funcionan.