San Cristóbal de Las Casas, Chis.

Los 249 desplazados del ejido Puebla, municipio de Chenalhó, retiraron el plantón que mantenían desde el 5 de marzo en el parque central de Tuxtla Gutiérrez, para exigir el retorno a sus casas, tras llegar a varios acuerdos con las autoridades estatales, informó Diego Cadenas Gordillo, director del Centro de Derechos Humanos Ku´untik.

En entrevista, dijo que el plantón fue retirado después de que fueron liberados Javier Cruz López y su hijo José Gómez Gutiérrez, presos desde mayo de 2016, cuando hechos violentos obligaron a un grupo de pobladores a abandonar el ejido de Puebla a consecuencia del conflicto poselectoral.

Además de la liberación de los dos indígenas que estaban acusados de homicidio de una menor de edad, el gobierno estatal entregó a los desplazados un recurso pendiente acordado en una minuta firmada en septiembre de 2017 para la adquisición de materia prima para la elaboración de los trajes regionales de las mujeres y el rembolso pendiente por alimentos, aunque no precisó la cantidad.

Señaló que las autoridades se comprometieron a brindar atención médica a los desplazados que radican en San Cristóbal y, lo más importante, el compromiso del gobierno de que el 20 de marzo sesionará el Consejo Estatal de Desplazamiento Interno, tomando como primer caso el de ellos.

Nos dijeron que estarían en la sesión representantes de la Secretaría de Gobernación en atención a las recomendaciones de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) en favor de los desplazados. Vemos con optimismo que hay un avance, aseveró Cadenas Gordillo.

Dijo que luego de retirar el plantón, los desplazados retornaron a San Cristóbal, con la advertencia de que si las autoridades estatales no cumplen con lo ofrecido, el miércoles regresarían a la capital del estado para plantarse y continuar la huelga de hambre que realizaban 10 tzotziles.