Con costo de un millón de pesos, el Gobierno de la Ciudad de México comenzó a sustituir las tapas de los registros donde se encuentran las válvulas en los 50 puntos donde el Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex) detectó que fueron cerradas, anunció el mandatario capitalino, Miguel Ángel Mancera.

Explicó que para abrirlas se requiere de una llave allen milimétrica que sólo será utilizada por los operadores del Sacmex, y así evitar que personas ajenas manipulen las válvulas.

En conferencia de prensa en el Antiguo Palacio del Ayuntamiento, señaló que a partir de que se dieron a conocer estas irregularidades no se han presentado nuevos reportes; no obstante, advirtió, seguirán los operativos de supervisión y vigilancia de la infraestructura hídrica.

Aclaró que no le interesa perseguir o meter a la cárcel a nadie, sino evitar estas prácticas y que el líquido llegue a las casas.

El titular del Sacmex, Ramón Aguirre Díaz, confió en que con estas tapas fabricadas especialmente y los operativos de supervisión la manipulación de válvulas va a ser histórica.

Interrogado sobre la posibilidad de adquirir las llaves milimétricas que se utilizarán para abrir las tapas, Aguirre Díaz no sólo lo descartó, sino que retó a buscarlas tres horas en la zona del Zócalo capitalino. No las van a encontrar, remarcó.