Especialista del Cinvestav subraya que hay un uso inadecuado de fármacos
Martes 13 de marzo de 2018, p. 36
El uso inadecuado y la prescripción excesiva, a veces sin un diagnóstico médico certero, de los antibióticos son las principales causas de un creciente desarrollo de la resistencia antimicrobiana, señaló Francisco Barona Gómez, investigador líder del Laboratorio Nacional de Genómica para la Biodiversidad, del Centro de Investigación y Estudios Avanzados (Cinvestav).
Desde los primeros días del uso clínico de los antibióticos –entre 1941 y 1943– la penicilina se volvió de utilización masiva. El hombre “se ha subido en una carrera armamentista” en busca de nuevos métodos y medicinas para enfrentar enfermedades con antibióticos, mientras las bacterias patógenas tienen una mutación sin fin, dijo el investigador Centro del Instituto Politécnico Nacional (IPN).
Grandes cantidades de medicamentos
En entrevista, el reconocido científico mexicano, integrante del Sistema Nacional de Investigadores, explica de manera sencilla que las bacterias causantes de enfermedades infecciosas han desarrollado mecanismos de resistencia en respuesta a las grandes cantidades de antibióticos clínicos a que han sido expuestas.
Barona Gómez, entre cuyas principales líneas de investigación se encuentran la evolución de las enzimas, así como las rutas metabólicas, advierte que el uso desmesurado e irracional de los antibióticos por parte de pacientes y médicos sin contar con un diagnóstico certero, ha generado una acelerada mutación de las bacterias patógenas que nulifica el tratamiento de gran mayoría de estos fármacos clínicos.
En tanto, Gerardo Aparicio Ozores, investigador de la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas también del IPN, indicó que es mediante la transferencia genética cuando las bacterias adquieren resistencia a los antibióticos, por lo que ahora no es suficiente encontrar nuevas moléculas para elaborar otros nuevos fármacos, sino conocer los mecanismos a los que recurren las bacterias para evadir la toxicidad de dichos medicamentos
.
Por separado, ambos especialistas explicaron que una de las causas de la creciente y acelerada resistencia de las bacterias patógenas se debe a que durante mucho tiempo los pacientes se han autorrecetado antibióticos de manera inadecuadas, además de que no concluyen su tratamiento médico, lo cual ha hecho que se fortalezcan.
Desde 2014, en un informe sobre el tema, la Organización Mundial de la Salud lo ha señalado como grave amenaza para la salud pública del planeta y prevé que infecciones comunes y lesiones menores que han sido tratables durante decenios volverán a ser potencialmente mortales.
El número de enfermedades que provocan bacterias son innumerables, y van desde acné hasta neumonías o infecciones respiratorias.
No obstante, Barona Gómez descarta cualquier escenario apocalíptico, pues señala que en la medida que un microorganismo evolucione a ser multirresistente lo hace en un esquema de costo
, es decir, tiene que sacrificar otras capacidades de sobrevivencia, aunque advierte del riesgo de vidas humanas por estas bacterias.
El investigador plantea una disyuntiva: “O seguimos en esta lucha armamentista donde todos nos enfocamos a conseguir una molécula y las echamos a perder, siguiendo el mismo esquema que hasta ahora se usa, o revisamos también el modelo donde utilizamos a las moléculas partiendo de un entendimiento fundamental de lo que significan la biología y la ecología de estos compuestos”.